Fui, soy y seré un lector empedernido. Comencé a eso de los 10 años con aventuras, Tarzan, Sandokan y otros similares me acompañaban en mis tardes. Fui creciendo y pasando a otros temas y otros autores. Poe, Lovecraft, Bradbury, A. Clark, Hesse, Huxley, los clásicos, en una divertida y variopinta mezcolanza, tratando de pensar en lo que ellos cuentan, en como lo cuentan y en pensarme a mí mismo, desde lo que soy, desde el aporte que ellos me dieron y desde las situaciones a las que la vida me enfrentó. Desde hace mucho tenía la intención de escribir, pero sufría el “Síndrome del papel blanco”, multiplicado por mi tremenda vagancia, que me impedía reescribir los textos a mano o a máquina. Yo pretendía pensar y repensar el texto y escribirlo de una….ILUSO!!!! Borges decía que pasaba horas “pensando el epíteto óptimo” y yo pretendía escribir derecho viejo, sin corregir!!!!!! Un auténtico salame!!! Por suerte para mí, aunque temo que para desgracia de la humanidad o al menos de los participantes de este foro, nació la computadora y con ella la posibilidad de corregir infinitas veces con una facilidad absoluta, y gracias a eso me largué a escribir, nomas. Pido disculpas anticipadamente a mis lectores por las tropelías cometidas en la redacción de mis historias. Estuve a punto de escribir “hasta pronto”, pero me di cuenta que eso no tiene sentido, así que será “hasta la próxima lectura” Titito