Fue mi paraiso en esos días, en esos musgos, ausencias, soledades, y nostalgias.ahi el alma navega por un mar de dulzura y finalmente en el así se anega.
sentí esa tarde tu corzón entre la brisa, mire el mar, mire una ola, se dolio esa ola, es que son todas las que rompen a llorar y a mi por favor dejame llorar a orillas del mar.
todo doy, por un silencio profundo de aguas vivas o por las escrituras que borran las espumas.y cuanto mar se sale de si mismo, en espuma, en galope, frente al reloj que nadie miro.
estaba yo en la arena del infinito mar, que me devolvio en mi estado natural, que serena va el agua, que serena va.
en aquel lugar, caminante que camina olvida su caminar con botella en mano y saltando sin cesar.solo por olvidar el mal que nos logro abundar.
yo te veia en los ojos gazos, llevabas un poco de alcohol y siempre dulce el viento y el camino en paz a orilllas del mar, resbalo en las olas la luna de asahar.
pues no ahi dolor mas grande de ser vivo, ni mayor pesadilla que la vida consiente por que no se atreve!, llora corazón que tienes razón.