Sin Vida ni Colores

¡Ya no puedo más mi amor!

Eres un veneno lento que corre por mi sangre llevándose mi vida a cada latido.


Día a día muero un poco porque tu amor nunca llega.
Tenía fe y esperanza en que un día me miraras mas no sucede.


La fe que mueve montañas quedó sin fuerzas y la esperanza yace exánime en una inmensa soledad donde agoniza.


Soy una flor con el tallo vencido y pétalos perdidos.

Sin esperanzas ni fe espero que la brisa, en esta noche larga y fria, termine de llevarse lo poco que ya soy; la nada que me queda.

Al viento volarán mis sueños y mañana, al hallarme, sabrán que de todos los colores, en el arco iris ya no habrá... celeste.