|
ninive,06.01.2012
|
Por indicación de bleobrizuela /bel cuento de Stig Dagerman: Matar a un niño.
Gracias por la indicación | |
ninive,06.01.2012
|
Matar a un niño
[Cuento: Texto completo]
Stig Dagerman
Es un día suave y el sol está oblicuo sobre la llanura. Pronto sonarán las campanas, porque es domingo. Entre dos campos de centeno, dos jóvenes han hallado una senda por la que nunca fueron antes, y en los tres pueblos de la planicie resplandecen los vidrios de las ventanas. Algunos hombres se afeitan frente a los espejos en las mesas de las cocinas, las mujeres cortan pan para el café, canturreando, y los niños están sentados en el suelo y abrochan sus blusas. Es la mañana feliz de un día desgraciado, porque este día un niño será muerto, en el tercer pueblo, por un hombre feliz. Todavía el niño está sentado en el suelo y abrocha su camisa, y el hombre que se afeita dice que hoy harán un paseo en bote por el riachuelo, y la mujer canturrea y coloca el pan, recién cortado, en un plato azul. Ninguna sombra atraviesa la cocina, y, sin embargo, el hombre que matará al niño está al lado de la bomba de bencina roja, en el primer pueblo. Es un hombre feliz que mira en una cámara, y en el cristal ve un pequeño carro azul, y a su lado a una muchacha que ríe. Mientras la muchacha ríe y el hombre toma la hermosa fotografía, el vendedor de bencina ajusta la tapa del tanque y asegura que tendrán un bonito día. La muchacha se sienta en el carro, y el hombre que matará al niño saca su billetera del bolsillo y comenta que viajarán hasta el mar, y en el mar pedirán prestado un bote y remarán lejos, muy lejos. A través de los vidrios bajados, oye la muchacha, en el asiento delantero, lo que él habla; ella cierra los ojos, ve el mar y al hombre junto a sí en el bote. No es ningún hombre malo, es alegre y feliz, y antes de entrar en el carro se detiene un instante frente al radiador que centellea al sol, y se goza del brillo y del olor de bencina y de ciruelo silvestre. No cae ninguna sombra sobre el carro, y el refulgente parachoques no tiene ninguna abolladura y no está rojo de sangre.
Pero, al mismo tiempo que, en el primer pueblo, el hombre cierra la puerta izquierda del carro y tira el botón de arranque, en el tercer pueblo, la mujer abre su alacena, en la cocina, y no encuentra el azúcar. El niño, que ha abrochado su camisa y que ha amarrado los cordones de sus zapatos, está de rodillas en el sofá y contempla el riachuelo que serpentea entre los alisos y el negro bote que está medio varado sobre el pasto. El hombre que perderá a su hijo está recién afeitado y, en ese momento, pliega el soporte del espejo. En la mesa, las tazas de café, el pan, la crema y las moscas. Sólo el azúcar falta, y la madre ordena a su hijo que corra donde los Larsson y pida prestados algunos terrones. Y mientras el niño abre la puerta, le grita el padre que se dé prisa, porque el bote espera en la ribera. Remarán tan lejos como nunca antes remaron. Cuando el niño corre a través del jardín, en todo momento piensa en el riachuelo y en los peces que saltan, y nadie le susurra que sólo le quedan 8 minutos para vivir y que el bote permanecerá allí donde está todo el día y muchos otros días. No es lejos lo de los Larsson: únicamente cruzar el camino, y mientras el niño corre atravesándolo, el pequeño carro azul entra en el otro pueblo. Es un pueblo pequeño con pequeñas casas rojas, con gente que acaba de despertar, que está en su cocina con las tazas de café levantadas y observan al carro venir por el otro lado del seto con grandes nubes de polvo detrás de sí. Va muy rápido, y el hombre en el carro ve cómo los álamos y los postes de telégrafo, recién alquitranados, pasan como sombras grises. Sopla verano por la ventanilla. Salen velozmente del pueblo. El carro se mantiene seguro en medio del camino. Están solos todavía. Es placentero viajar completamente solos por un liso y ancho camino, y a campo abierto es mucho mejor aún. El hombre es feliz y fuerte, y en el codo derecho siente el cuerpo de su futura mujer. No es ningún hombre malo. Tiene prisa por alcanzar el mar. No sería capaz de matar a una mosca, sin embargo, pronto matará a un niño. Mientras avanzan hacía el tercer pueblo, cierra la muchacha otra vez los ojos y juega que no los abrirá hasta que puedan ver el mar, y al compás de los muelles tumbos del carro, sueña en lo terso que estará.
¿Por qué la vida está construida con tanta crueldad, que un minuto antes de que un hombre feliz mate a un niño, todavía es feliz y un minuto antes de que una mujer grite de horror, puede cerrar los ojos y soñar en el ancho mar, y durante el último minuto de la vida de un niño pueden sus padres estar sentados en una cocina y esperar el azúcar y hablar sobre los dientes blancos de su hijo y sobre un paseo en bote, y el niño mismo puede cerrar una verja y empezar a atravesar un camino con algunos terrones en la mano derecha envueltos en papel blanco; y durante este último minuto no ver otra cosa que un largo y brillante riachuelo con grandes peces y un ancho bote con callados remos?
Después, todo es demasiado tarde. Después, está un carro azul al sesgo en el camino, y una mujer que grita retira la mano de la boca, y la mano sangra. Después, un hombre abre la puerta de un coche y trata de mantenerse en pie, aunque tiene un abismo de terror dentro de sí. Después hay algunos terrones de azúcar blanca desparramados absurdamente entre la sangre y la arenilla, y un niño yace inmóvil boca abajo, con la cara duramente apretada contra el camino. Después, llegan dos lívidas personas que todavía no han podido beber su café, que salen corriendo desde la verja y ven en el camino un espectáculo que jamás olvidarán. Porque no es verdad que el tiempo cure todas las heridas. El tiempo no cura la herida de un niño muerto y cura muy mal el dolor de una madre que olvidó comprar azúcar y mandó a su hijo a través del camino para pedirla prestada; e igualmente, mal cura la congoja del hombre feliz, que lo mató… Porque el que ha matado a un niño, no va al mar. El que ha matado a un niño vuelve lentamente a casa en medio del silencio, y junto a sí lleva una mujer muda con la mano vendada; y en todos los pueblos por los que pasan ven que no hay ni una sola persona alegre. Todas las sombras son más oscuras, y cuando se separan todavía es en silencio; y el hombre que ha matado a un niño sabe que este silencio es su enemigo, y que va a tener que necesitar años de su vida para vencerlo, gritando que no fue su culpa. Pero sabe que esto es mentira, y en sus sueños de las noches deseará en cambio tener un solo minuto de su vida pasada para "hacer este solo minuto diferente".
Pero tan cruel es la vida para el que ha matado a un niño, que después todo es demasiado tarde.
| |
ninive,06.01.2012
|
(Alvkarleby, 1923-Enebyberg, 1954) Escritor sueco. Influido por los novelistas estadounidenses de los años veinte, publicó las novelas La serpiente (1945) y El niño abrasado (1948). Reflejó la ansiedad y el temor resultantes de la II Guerra Mundial.
| |
leobrizuela,06.01.2012
|
Notable relato, que impresiona no sólo por la historia, sino por la construcción.
Un hecho final, que no es el verdadero final sino su antecedente, enunciado en los primeros párrafos. Y es que el interés del cuento no reside en el acto accidental, elidido en su descripción, sino en el entorno, formulación que el autor propone entre interrogantes en el antepenúltimo párrafo.
Es de notar la carencia de subjetividades en lo relativo al pensamiento y sentimientos de los personajes; la narración es casi meramente descriptiva. Y cada uno de ellos no será denominado con un nombre corriente, sino con el apelativo de surge de la correspondencia biunívoca con su papel en el drama.
La insistente alusión al hombre "que no es malo", a la actividad doméstica, al común deseo de "remar hasta lo más lejano" son determinantes para enmarcar el cuento en los carriles que el autor, astutamente, propone.
El desarrollo remite, en cuando a la simultaneidad de los tiempos, al guión cinematográfico, típico del relato americano de "cámara en mano".
Creo que es un gran cuento, que hace escuela por su formato particular, invitando a la relectura instructiva, a la par de la emotividad que despierta el contenido. | |
LADANNY,06.01.2012
|
Leer este cuento produce un dolor intenso. A lo menos es lo que yo sentí. Me parece excelente la forma amenazante de anunciar y machacar sobre la futura muerte del niño.
Como contrapartida recomiendo leer "La bestia debe morir" de Nikolas Blake. | |
Yvette27,07.01.2012
|
Comparto con los compañeros el sentimiento que acompaña la lectura de este cuento.Emoción, dolor ...dijeron y agrego admiración por un envidiable oficio de escritor.
Hasta ahora supimos que en general un cuento se desarrolla hasta culminar en un final más o menos previsto, de sorpresa a veces, abierto otras... Aquí el final está ya en el título y no hay sorpresas no hay huecos para la esperanza; sabemos que ese niño feliz que se abotona la camisa y saldrá a pedir azúcar a los vecinos del pueblo más allá del camino morirá.
A pesar de conocer el descenlace, la tensión aumenta,el horror por lo que sabemos que va a suceder acelera la respiración.
Este cuento dado vuelta me gustó mucho a pesar de los innumerables errores de traducción del sueco al castellano. | |
joset,07.01.2012
|
Para mí el cuento , excelente, plantea un tema muy delicado: el de la culpa.
La culpa que sienten los padres, la culpa de los ocupantes del coche. Culpa sin intención pero terriblemente dolorosa.
Por otro lado me llevó a reflexionar sobre el tenue hilo que separa la felicidad de la desgracia y veo también una advertencia a los conductores.
Un segundo de distracción puede cambiar muchas vidas. | |
qoele,09.01.2012
|
Seguramente, o tal vez, navegaré contra la corriente de los comentarios o lecturas de este cuento. No lo sé, porque los leo después de mandar el mío.
Bien, no me gustó para nada esta historia, salvo alguna alusión a campos de centeno, aroma a ciruelos silvestres, y cosas así; pero como historia me dejó más frío que un témpano.
Y esa forma de escribir, como de libreto cinematográfico, que va describiendo a saltos breves, objetos, personas, situaciones y etc., me dejó indiferente.
Definitivamente hoy me levanté no apto para este tipo de cuentos. Lo siento. | |
ninive,09.01.2012
|
qoele Estamos buscando comentarios sinceros. No es obligatorio que sean elogios.
Es verdad es que la apreciación de una lectura depende del momento en que se lee.De nuestro estado de ánimo.
Este cuento me demuestra que la elección del título no debe ser siempre atractiva. En general consideré que el título no debe revelar el contenido del cuento. Aquí sucede todo lo contrario.
para conversar . | |
justine,09.01.2012
|
Hola queridos contertulios:
Cierto que aquí el título es absolutamente revelador y contiene en sí mismo el contenido del cuento, pero sólo de una forma sutil. Si este no fuera el título, el cuento carecería de una de sus peculiaridades, la tensión que produce en el lector. Creo que de ningún otro modo en tan breve espacio produciría la desazón que desata. No sólo describe la ansiedad sino que la recrea. Sabemos que el suceso ocurrirá porque lo revela en el propio título y en la introducción del cuento y justo ahí te crea la impotencia cuando presenta a su ejecutor iniciando igualmente lo que cree que será un día y el inicio de un futuro feliz. La casualidad, la desgracia, el momento nefasto, es cotidiano e inherente al transcurrir de la vida (al igual que lo son sus contrarios) pero nada puede predisponernos más a la rabia , que la muerte de un inocente, de un justo y por demás un niño. El autor nos enfrenta sin piedad a la ansiedad, la angustia, la impotencia de ver como va transcurriendo el relato sin que podamos impedir lo que desde el inicio sabemos inevitable. | |
ninive,09.01.2012
|
justine no s[e si te pas[o lo mismo que en el cuento anterior en el que notamos todos lo superfluo de la frase final.
También en este texto, como en el de Millás se puede obviar la última frase.¿qué es lo que lleva a los escritores a querer "rematar " un texto que ya había dicho todo lo que tenía que decir? Poca confianza en la capacidad del lector? | |
qoele,10.01.2012
|
Claro que sí, ninive, yo también pienso que la sinceridad, que es diversidad de opiniones y puntos de vista, es lo que nos enriquece. En caso contrario basta mirarnos al espejo de las lecturas iguales y seguir tal cuales.
Personalmente, muy de cuando en vez me remece hasta los tuétanos un cuento, y cuando ese milagro ocurre, el recuerdo o, almenos, la sensación de ese recuerdo, continúa a acompañarme siempre.
Claro, influye el momento en que se lee y cuál de nuestros innumerables "yoes" es receptivo en ese momento.
Me permito una pequeña anécdota, para desorientar al humorismo, de un grupo de matemáticos que fueron a comer una pizza. Cuando el mozo lleva la pizza a uno de los matemático, le pregunta si desea que se la divida en seis pedazos, y éste le responde que no tiene mucha hambre y que se la divida, por lo tanto, sólo en cuatro pedazos.
Como vemos, el sentido del humor es muy variegado en este mundo, como las lecturas de los cuentos. | |
ninive,10.01.2012
|
Les hago notar (hay que volver a ver el texto) el hábil uso de los tiempos verbales. Nos presenta una acción que pasó en presente casi todo el tiempo y a vecer en futuro para indicar lo que sucederá "el hombre que pronto matará un niño" "el hombre que perderá su hijo" "un niño será muerto por un hombre feliz.
Es para aprender y usar las expresiones verbales del mejor modo posible. | |
justine,10.01.2012
|
Muy notable tu señalamiento, ninive. | |
qoele,11.01.2012
|
La biografía de Stig Dagerman, autor que desconocía completamente, me pareció muy interesante, y atormentada. | |
ninive,11.01.2012
|
QOELE
La intención de estos foros de cuentos es, a la vez que proporcionar buena lectura de los autores conocidos, conocer escritores en nuestro idioma o a través de traducciones.
En este cuento de Sig Dagerman, hay errores de traducción fácilmente obviables.
Un gran escritor israelí ,HAIM NAJMAN BIALIK, dijo que "leer la Biblia en una traducción, es como besar a la novia a través del velo"
| |
qoele,11.01.2012
|
En mi opinión habría mucho que conversar acerca de la traducción, que es un arte muy difícil a la cual se debe la divulgación de la cultura tanto humanista como científica y, en algunos casos, la traducción supera al original.
En el caso de la traducción de la Biblia encontramos un ejemplo del valor de una traducción, porque Lutero fundó la lengua alemana, justamente con la traducción de este libro. | |
leobrizuela,11.01.2012
|
Rescato la duda de Nínive en cuanto a la inserción de esa frase final, agregada en forma superflua al texto.
Y recuerdo cuando en mi propio caso, en mis inicios, escribía tratando de ser explicativo al extremo, habida cuenta de críticas que señalaban no entender un final, por ejemplo. Hasta que caí en cuenta que un mismo relato textual no puede ser interpretado igualmente por el entendido que por el profano. De ahì que el escritor deberá considerar el grado de conocimiento, entrenamiento literario y aptitud intelectual de quienes van a a leer su obra.
En esta oportunidad estimo adjudicar esa frase postrera (que debiera ser "escrita" en la mente por cada lector hábil en su oficio), a un exceso de quien tradujo el escrito.
Y con ello logra no sólo rebajar la calidad del cuento, sino también privar al lector de aportar un mínimo de su caletre para completar el cuadro y participar, de algún modo, en el contexto del relato mediante una reflexión individual.
No olvidar aquello de "traduttore-traditore" que enseñan los italianos.
En cambio los franceses suelen señalar que las traducciones son como las mujeres: la que es fiel no es buena y la que es buena no es fiel. ¿Será? | |
qoele,11.01.2012
|
Volví a leer, por curiosidad, la frase cuestionada. Me parece que, efectivamente, se podría mejorar en la sección ejercicios de ninive, por ejemplo.
Sin embargo, el concepto que encierra no me parece superfluo, o que disturbe el texto, porque dice algo no descontado, es decir, para alguien que ha matado un niño la vida se vuelve tan despiadada con él, que ya “todo” es demasiado tarde para ese ser.
No hay escape porque mató también a su ser bueno, es decir, su mundo entero y no hay lugar ni espacio a cualquier vía de salvación futura, en el cielo o en la tierra.
Este asesino no es un Raskolnikov. | |
leobrizuela,11.01.2012
|
Modestamente, Qoele, creo que la forma de mejorar la frase es eliminándola. Todos podemos colejir los sentimientos del matador sin que lo expresen con todas las palabras. | |
ninive,11.01.2012
|
Amigos, quisiera que me ayuden a entender cómo en una página de cuentos, supuestamente integrada por personas interesadas en el tema nuestro rincón de cuentos y opiniones, tiene tan poca participación.
justine, leobrizuela, loretopaz,quole, ladanny y yo
| |
leobrizuela,11.01.2012
|
Hay que invitar a participar a aquellos que reconocemos como de buena pluma, o que por lo menos lo intentan. No hago enumeración ociosa, de sobra los conocemos.
| |
justine,11.01.2012
|
No sabría explicarlo muy bien, ninive, yo misma a veces me siento superada por lo cotidiano. La tertulia requiere disposición de ánimo, y aunque es enriquecedora y a veces distiende, también requiere esfuerzo y discernimiento del que no se dispone alegremente después de una dura jornada de trabajo.
La participación es satisfactoria, pero también requiere cierto grado de compromiso. Por eso yo sigo pensando leobrizuela, que son los propios cuenteros los que han de invitarse a participar, porque la mesa está servida. A veces las invitaciones pueden sentirse "obligaciones".
Creo que todo el que entra en la página lee los últimos mensajes, y por tanto se conocen los foros que están activos. | |
ninive,11.01.2012
|
Sabes Justine, muchos ignoran eso de los últimos diez foros y se dedican exclusivamente al foro en el que están acostumbrados a participar. No descartaría la idea de leobrizuela. Podríamos poner otro cuento bajo el nombre de foro Mesa cuadrada :debate sobre el cuento....
Lo de mesa cuadrada es para que funcione la asociación de que se trata de un lugar abierto a las opiniones. Eso si, deberíamos cuidar el nivel de las prestaciones.
Se me ocurre el cuento de Faulkner, una rosa para Emily, en traríamos en el terreno de la literatura gótica. Es un cuento excelente en su género.
leo¿¿ justine¿¿ todos¿¿¿
¿¿están de acuerdo? | |
leobrizuela,11.01.2012
|
Entiendo que Faulkner es una variante interesante, estoy de acuerdo, aunque desconozco (por ahora) el cuento. | |
divinaluna,11.01.2012
|
me gustaría unirme al grupo y comentar, porque es una manera de aprender unos de otros y a través de un autor reconocido.Claudia | |
m_a_g_d_a2000,12.01.2012
|
Escribo el comentario sin haber querido leer ningún otro antes. La lectura de este cuento me ha producido una gran angustia. Angustia ante descripción de un pueblo pequeño, bucólico, que inspiraría seguridad, de unos personajes ocupados en prepararse para un día de pesca feliz. Por la narración del comienzo de un día que sabemos que se va a romper con la muerte de un niño, quizás el hecho que más puede conmover.
Del cuento me gusta la forma en que está escrito. Desde mi punto de vista todo el texto es una gran descripción, incluso cuando narra. Al principio sin detenerse demasiado en los personajes así el ritmo es más rápido, y según avanza utiliza frases más cortas con ese “y” repetitivo, con tantas comas para marcar el transcurrir lento del tiempo, la pereza de una mañana festiva, feliz. Eso hace que aún sea más cruel saber qué va a suceder. Es una descripción sin adornos minuciosa. Los personajes parecen moverse a cámara lenta, como en una película. Podemos ver cómo cada uno de los pasos del niño hasta quedar debajo del carro, el horror del hombre que lo atropella, cada gesto, al igual que los de la mujer que le acompaña.
Parece que el autor se regocija en la plácida felicidad de los personajes para contraponerla con el vuelco que darán en un segundo, para mostrar la crueldad de la existencia.
Y en el último párrafo de nuevo las frases se vuelven a hacer más largas, gramaticalmente más complejas y así el ritmo es más rápido para mostrar la angustia que ya no abandonará al hombre que ha matado al niño, el dolor con el que ya ve todo lo que le rodea.
| |
m_a_g_d_a2000,12.01.2012
|
Acabo de leer la conversación que tenéis sobre los aspectos más "practicos" del foro. Doy fe de que llevo mucho tiempo entrando a la página y nunca me había fijado en que aparecían los foros que estaban activos, sólo me había fijado en los últimos textos escritos. Seguro que a otros muchos cuenteros les ocurre lo mismo. | |
qoele,12.01.2012
|
Leyendo el comentario de magda me di cuenta que yo el cuento lo leí muy mal, es que hay días, como dice justine, que son medio extraños a la literatura o a la percepción del entorno.
Yo hablaba de asesino, cuando veo, por magda, que se trata de un pobre tío que atropelló casualmente a un niño. En este caso no es un asesino absolutamente, y la cita de Rakolnikoff no tiene nada que ver.
Respecto a la última frase, yo creo que molesta, además, porque por el sistema de los cuentosnet, aparece separada del texto y esto para el ojo ya es una molestia, digo yo.
En todo caso, me parece que nada le quita al lector ni nada descontado hay en ella, porque es una bonita y potente reflexión del autor que un lector no puede hacer.
Me explico, la frase dice, más o menos, que después de un hecho de esta naturaleza, que es el cuento, el título, el centro de la historia, ya todo lo que haga en la vida un ser que se encuentra en esta situación "llega demasiado tarde".
Para mí es un acierto ese final.
Lo bueno es conversar y encontrar los infinitos matices que nos regala una lectura y un buen escritor.
En cuanto a que participa poca gente a esta iniciativa, no es preocupante, porque poco a poco aumentarán los lectores, si el espacio se mantiene y la perseverancia también.
A veces sucede que el cuento no gusta, simplemente, y no se deja un comentario o, en mi último caso, no me gustó y lo leí muy mal, y comento igualmente. En fin, es lo interesante de una página literaria y de los foros, cuando se los aborda con sinceridad y con la propia verdad. | |
m_a_g_d_a2000,12.01.2012
|
A mí tampoco me gusta esa última frase, no me aporta nada nuevo, muestra algo obvio para cualquier lector y rompe la tensión del resto del relato. | |
ninive,12.01.2012
|
Bienvenidas al círculo literario:bdivinaluna y m_a_g_da./b Como pueden ver en este mismo foro ya hemos leido varios cuentos , creo que hemos dicho ya todo lo posible sobre ellos pero no los pierdan. Cortázar, Borges, Roa de Bastos, Onetti las esperan.
Si queremos llegar a escribir muy bien tenemos que abundar en buenas lecturas. | |
filiberto,12.01.2012
|
Una historia que narra lo que ocurre a diario siempre es impactante porque lo dramático, si nos toca de cerca, sensibiliza más.
Al principio no me atrapó por la manera entrecortada del relato, como en frases arrojadas sobre el papel. Recién cuando empecé a ver los detalles del entorno (los álamos y
los postes de telégrafo, recién alquitranados, pasan como
sombras grises) y el hecho de los sucesos en tiempo presente lograron que como lector estuviese participando de la acción y constantemente extendiendo la mano para frenar el desenlace esperado desde los primeros renglones. Finalmente comprendí que ese narrar entrecortado (¿cine?)es un gran aporte para la tensión del cuento. Definitivamente me gustó.
| |
divinaluna,12.01.2012
|
A medida que iba leyendo el cuento, mi corazón latía más rápido, esperando el instante en que el niño muriera, el hombre dejara de ser feliz y todo el mundo cambiara para luego volver a la normalidad más absoluta, la indiferencia del resto de la humanidad y la pena eterna de los padres. Me senti muy acongojada aún sabiendo el final temido. Esa compenetración con la lectura solo la logran los grandes escritores. Me gustó el cuento me hizo pensar en como describiría yo un hecho como ese. | |
justine,12.01.2012
|
Bienvenidas divinaluna y Magda a este círculo literario. Cada apotación de cada nuevo lector ayuda a ahondar en el maravilloso mundo de los cuentos y de la literatura. Cada vez que alguien acude al foro nos hacemos más ricos.
Adelante ninive con el Foro de la mesa cuadrada, círculo literario debate sobre el cuento "Una rosa para Emily" de Faulkner.
A los nuevos contertulios les invito como hizo ninive a pasarse despacio por los últimos cuentos y comentarios. Los cuentos son extraordinarios y hay comentarios que no se deberían perder, e incluso podrían dejar también las opiniones sobre las lecturas. | |
ninive,12.01.2012
|
Les aviso que Una Rosa para Emily es un cuento algo largo (creo que es el más famoso de Faulkner) No hay apuro, mañana lo publico y mientras lo leen y se deciden a opinar, les iré dando algunas informaciones sobre el cuento y el autor. | |
justine,12.01.2012
|
Muy bien, hasta mañana entonces.
Buenas noches a todos
| |
|
|