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| Lacaradelaluna,06.12.2010
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Querido Santaclaus:
Este año lo único que quiero que me regales son los 62 kg que perdí en estos dos años y pico. No, no, no es broma. Desde que los perdí, mi vida ya no tiene sentido. Perdí la capacidad de desquiciarme, perdí el interés por las vidas ajenas, perdí la destreza para estar en varias páginas al tiempo y con más de 7 clones (también al tiempo). Pero además ya no tengo el tiempo libre que me dejaba mi nula vida social de obesa amargada por tanto ya no puedo pasarme 18 horas al frente de la computadora pendiente de quién se tira un pedo en el cyberworld y encima ya no me queda inspiración para inventarme cuentos mediocres y los bodrios de poemas.
Necesito de vuelta toda la grasa abultada en mi abdomen y mi trasero, necesito de vuelta mi insatisfacción y desprecio por mi misma que se reflejaba en un delirio de belleza y grandeza que asustaba hasta a mis gatos.
Por eso, este año no te pido el carro que también me está haciendo falta, desde que me volví deportista me voy caminando las 40 calles que hay hasta mi oficina en la mañana y de vuelta al final de la tarde, eso me quita tiempo de ocio e inutilidad. No te pido el novio que te pedía hace un par de años porque me tienen podrida la recua de inútiles que ahora si dicen que soy la mujer de su vida y la "dama blanca de sus sueños" además porque desde que tengo este cuerpo ya no son los ojos mi mayor atractivo y ultimadamente me los veo tristes en el espejo. Tampoco te pido el trabajo que te pedía cuando fui a la quiebra y no tenía ni para comprarme un vinito de mesa con qué emborrachar las penas, desde que conseguí el trabajo que siempre había soñado porque el que me entrevistó no se pudo resistir a mis encantos y ni se detuvo a leer mi hoja de vida antes de invitarme a cenar, todo parece estar en equilibrio, pago mis propias cuentas y hasta me alcanza para ahorrar.
Como entenderás, mi vida ahora es miserable. No tengo razones para vivirla. No tengo nada que me frustre, nada que me haga sentir la impotencia del fracaso, nada que me haga revivir esa lástima por mi desgraciada existencia.
b¡Devolveme los putos 62 kilos y quedamos a mano, gordo de la mierda! | | |
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