Nunca supe quien era, pero en la escuela se me obligaba a decir mentiras, a decir que me llamaba fulano de tal, hoy con veinte años estoy intentando rescatar lo poco que soy y transformarme en lo que realmente fui durante tanto tiempo sin tan siquiera sospechar que al mirar la sombra me estaba viendo a un espejo.
Ya luego vienen mis poemas y eso porque quieren saber que son los ojos.