Nací en la finca de mi abuelita, que se llamaba Carmen, ya murió, de un infarto, y los últimos días los pase con ella en la clinica porque la tenían internada por un cancer en los pulmones.
Mi mamá se llama María, y cuando se acercaba a su cumpleaños 19, y terminando el bachillerato, me concibió sobre el capó de un mustang rojo (nada de lo que aqui estoy refiriendo es falso, a menos que mi mama me hubiera mentido), lo hizo por primera vez con un señor diez años mayor que ella, mi papá, con quien vivo actualmente. Se llama Raíl, y es un buen padre, solo que terco y un poco desmemoriado.
Mi mamá terminó los estudios de secundaria en el pueblo en que viviamos, y me dejó con mi abuela y mi papá mientras estudiaba en la capital artes plasticas. Mi papa toda la vida ha sido un obrero.
Bueno. Yo crecí como ya dije, en el pueblo, allí estudié hasta el bachillerato, mi vida durante ese lapso no ha sido muy interesante, de pronto si sostuviera una conversación con alguien me manarian los recuerdos y te tendria algo mas interesante que comentar.
Ahora vivo en un departamento en el centro de la capital, desde donde escribo esto, un quinto piso, y hace mucho frío.
Mi mamá no volvió, ni una llamada ni nada.
Mantengo a mi papá con lo que me gano en la escuelita enseñando a niños sordos a que aprendan a comunicarse, pues también nosotros tenemos derecho y no somos unos bichos raros como nos pinta la gente.