Que hermosas son las mañanas ahora que amaneceses conmigo, el viento ahora sabe a ese dulce nectar de tu alma En eso nos convertimos en dos amantes, dos compañeros, en dos amigos. Hermoso es el día como hermosa tú, mi vida, y hermoso nace en la mañana al entrar el sol por la ventana
Texto agregado el 07-04-2005, y leído por 119 visitantes. (3 votos)