Carla cuando llego a su ciudad acompañada por los lobos del gran bosque que ya se veía a lo lejos, vio q tan desolada estaba y rezo por su vida y por la de sus compañeros, solo escombros y cenizas, tal como lo vio la ultima vez q piso ese lugar.
Busco por todas partes algo q le diera un signo de poder volver tranquila y emprender su viaje hasta "la torre" en busca del cuerpo que ya era un mártir en aquel entonces... no veía ni si quiera rastros de vida ni incluso las sombras que desataron el lugar, difícilmente eran visibles los lugares donde habían estado las pequeñas y humildes casas, gracias a su comunicación con los lobos encontraron algunas cosas q podrían servirle en el viaje de vuelta, caminaron durante unas 6 horas recolectando cosas y ropa para el abrigo. Sabia que todo estaría muy frió en los próximos días, su gran sentido se lo decía.
Al llegar a un lugar en el que ella creía q su casa había estado ahí, miro a los alrededores gritando su rabia y dolor al aire, a pesar de ello no lloro, creía que no había causas para eso. A los pocos minutos se dio cuenta q uno de los lobos estaba muy pendiente en algo q se venia acercando, agudizo su vista para notar a lo lejos que era una esfera flotante, eso la alarmo y la puso en un estado de tensión y defensa, los lobos comenzaron a gruñir sin caminar, así como esperando q Carla les diera la orden. Cuando la esfera entro dentro del radio de ataque de los lobos libero 4 sombras, cosa que ya se esperaba Carla, los lobos atacaron con furia, y a pesar de su gran fuerza, las sombras parecían el doble de fuertes q ellos, mientras los lobos atacaban Carla huía de ese lugar hasta q algo inundo su mente de esperanza, algo q le dio la fuerza como para devolverse y atacar a las sombras, algo le decía "las palabras son mas fuertes que los actos", se volvió y miro secamente a una sombra, y como si la sombra sintiese su presencia se acerco con rapidez a ella, y cuando ya estuvo muy cerca Carla grito muy fuerte:
- ¡Alto!, malditas sean ustedes sombras, y q el poder del ya no nombrado cielo las lleve al mismo infierno.
Por un instante pareció que todo el planeta se detenía en una fracción de segundo que parecía una hora, y como si la misma tierra hubiese escuchado el llamado de la "fuerza" se trago a las sombras dejando un sendero de pasto al frente de Carla, invitándola a regresar y emprender su viaje hasta "la torre".
Los lobos se le unieron nuevamente y la acompañaron rodeándola, Carla se dio cuenta q la voz le parecía conocida, el Niño-a vivía en su interior, solo había que encontrar su cuerpo.