Cuando el niño-a sintio que nuevamente el fuego de los ojos del Leviatán lo quemaba, tubo una reacción de alejarse. Pero en ese instante ya era tarde. La bestia gigante estaba tan cerca que incluso aun que se moviera terminaría bajo las garras del monstruo de una u otra forma. Sin pensarlo se lanzo hacia el gigante alado en dirección a sus ojos, al mismo tiempo que la bestia de un manotazo lo lanza unos cien metros lejos del portal.
El golpe fue casi mortal, pero una vez mas gracias al campo de energía no recibió tan directo el golpe, pero no aun salvándose de lo que veía, una gigantesca herida desde el hombro hasta el codo del brazo derecho hecha por una de las garras del guardián del portal, intentando levantarse se dio cuenta que no podía su brazo estaba quebrado, comenzaba a sentir el dolor una vez desaparecido el campo. Después de esto miro directamente a la mano que le habia producido tal herida, y como muchas veces antes, grito. La mano de la bestia comenzaba a quemarse por alguna energía, el Leviatán a este acto gruño anulando el grito del niño-a casi reventándole los tímpanos, dejándolo aturdido miro cuando se desvanecía, el Leviatán se acercaba cada vez mas, con intenciones no muy buenas.
Dormido por el cansancio mortal que lo agobiaba, el niño-a dejo caer su cabeza al suelo de los huesos que rodeaban el portal, mientras el gato en su mente repetía cada vez mas fuerte “despierta niño-a... despierta!”.
Ya era tarde, antes de poder reaccionar al ataque de la bestia, esta le habia atravesado el cuerpo como una hoja de papel, el niño-a sintio más dolor que nuca y al abrir los ojos, su campo de energía volvió a aparecer, grito lo mas fuerte que pudo, ahora el Leviatán caía por tan magna energía que cada vez lo debilitaba mas, el campo rodeo al Leviatán como una red, al suceder esto el Leviatán trato de liberarse sin resultado alguno, la herida del niño-a sangraba demasiado, el Leviatán comenzó a convertirse en lo que era anteriormente, la estatua de mármol, la red se comenzó a achicar transformando la estatua en polvo como una prensa.
Gravemente herido, el niño-a ya nada podía hacer, miro a su lado y vio como el gato salía de su cuerpo, trato de moverse, pero el portal estaba lejos, no lo lograría, como ultimo intento miro a su alrededor y vio como los espiritus habían desaparecido todo estaba en paz, el ultimo cielinfierno estaba limpio del mal, el gato lo miro y el niño-a supo que eso era señal de algo que no predecía nada bueno, cerro los ojos y dejo pasar el tiempo.
|