Búscame cuando a mas nadie encuentres a tu lado, y sepas realmente que con o sin ellos siempre te has estado engañando y estás sola, aún sin mí contigo para de menos acompañar a la puerta a tu soledad disfrazada de falso carmín y tela brillante y satinada, pegada a tu para mi tan hermoso y conocido cuerpo.

Búscame en sueños e intenta alcanzarme si controlarlos puedes un día y en ellos logras encontrarme en más de una vez en que yo también te esté invocando en los sueños míos, que cuando sueñas cumples tus más profundos deseos y será que yo también te sigo aún buscando sin resultado alguno.

Búscame cuando el viento lleve hasta ti mi perfume que una vez en tu boca y piel se impregnó por más de un efímero día, porque respirando espero día tras día encontrar tu aroma y no aprendo todavía a olvidar tus gestos sobre mí cuando sudando dulce conseguías enseñarme lo hermoso que puede ser todo.

Búscame cuando de mis besos te acuerdes y platiques con alguien de lo que te hice sentir antes de morderte en los labios, figúrate que estas frente mío y a punto estas de besarme nuevamente, pero no puedes ni hacerlo ni contenerte de lograrlo, cuéntale a quien sea que te hago falta si es que te pasa como a mí.

Búscame si mi sabor en tu cuerpo permanece intacto después del baño que ya no puedes darte de mí y de mis locos besos y abrazos que te estrecharon hasta robarte el aire, anda y descuelga el teléfono que tienes frente pero está el miedo, tal vez de no encontrar en mí lo que te falta los días en que mi recuerdo ya no duerme contigo abrazado.

Búscame una vez que el mal que te he hecho se subsane por si mismo y logres perdonar mis defectos, despierta extrañando mis brazos o simplemente con mi nombre en la boca tuya, que contigo me pasa igual y espero no sé que cosa, pero que tan pronto te decidas me llames o vengas a tu casa unas horas.