te extraño porque puedo
y cómo no quisiera
sentirme queriéndote cuando te siento distante

la verdad es simple:
quiero una escalera.
y quiero
con esa escalera
hacer mi mundo contigo
por ejemplo,
bajar a la tierra
para encontrar las palabras coherentes
como tú
que le devuelvan el sentido a las palabras que pronuncio al hablarte
también
a las palabras que pronuncio al pensarte
pero más aún a las palabras que siento al escribirte

lo que quiere decir
que quiero devolverle el sentido a adorarte

y cuando digo sentido
no me refiero exactamente a la izquierda
tampoco precisamente a la derecha
ni al camino que tome todo esto
mucho menos
a esa locura con que uno cree querer a alguien
y a la final entre tanto querer que parece tener sentido
terminemos tirándonos por un precipicio

me refiero en cambio
al sentido queriendo decir cordura
a ese quererte a tiempo
hablarte a tiempo
callarme a tiempo
y desaparecerte...
por el contrario
a destiempos
en los momentos menos oportunos de nuestros contados días
para dejarme desconcertada
y que recuerde otra vez
que esto que hacemos
de verdad no tiene sentido.

pero lo que de verdad quiero
es subir con la escalera
así sea un instante
así sea un momento
subir con la escalera
y ahora
quererte desde el techo.