Las palabras se demoraban en salir de mi boca, y si lograban hacerlo, no lo hacían ordenadamente.
Me reprochabas, querías que te lo dijera todo de una vez, y lo hice.

-Te extraño
- Y yo a tí

Tu expresión cambió, para bien y para mal. Tu mirada ahora era turbia e indirecta. Tus labios temblaban, de frió o de miedo. Tu corazón empezó a latir cada vez mas rápido, y no se detuvo.
Tus manos frías se fueron acercando a mi cuerpo, y abrazándome a el tuyo. Cada vez sentía tu respiración más, cerca, y mas intensa. Tus labios...

-Esto está mal, tienes novia.
-No importa que esté mal.

No importa, respondiste, no importa... Y así dices saber amar, Mi cielo, eso no es amor. Friamente deduciendo, talvez querías saber lo que sentías, pero,¿ pensanste en lo que yo sentía? Lo dudo.
Un cuarto es abierto, dos personas son alojadas por unas cuantas mochilas. No te pongas mal mi vida, déjame llevarte de vuelta a nuestro pasado.
No soportamos el calor, y nos dejamos llevar por el deseo. Un beso.

- No...

Tan solo un beso bastó, para recordar nuestra historia... Tanto tiempo atrás, tan corta. Entre nosotros siempre hubo " algo" pero, lamentablemente, no llego a más después del primer año.

-Hablemos, dame tiempo, creo es mejor olvidemos todo lo de está noche, no quiero sonar católico pero esto es un pecado gravísimo... Empezemos de cero.

Mi niño, mi ser, ¿no te diste cuenta del mal desde el principio? No supiste afrontar tus deseos... Y mira como acbado nuestra velada. Absorbiste la alegría que yo trataba de contagiarte, y ahora ninguno sonreira. Dices, no quieres ser del todo, completamente culpable, pero mirame a los ojos, y dime,¿ acaso no lo eres?
En el fondo se, no te duele como a mi. Tu tienes a alguien mas, entonces, como es de costubre, soy la 3era carta.
Amor, no juegues conmigo, te confesé lo que sentía y rompiste mi alma.