NEGROS

¨¿Que pasará a nuestro país, si estamos en condiciones de enviar el hombre a la luna y no podemos controlar al odio de los hombres en nuestras ciudades? ¨...

Así finalizaba el informe de la Comisión Mac Coon, que debió investigar los hechos de violencia en la ciudad de Los Ángeles en el año 1965; los que costaron la vida de treinta y cinco personas, una buena parte de la ciudad quemada y más de tres mil heridos y detenidos.

Aquello sucedía por la intolerancia de los "poderosos", los que no supieron comprender que debajo de una piel solo se encuentra al hombre...
La necesidad y angustia llevaron a los negros a quemar y violentar, es decir: A reaccionar.

En la Argentina reciente, la intolerancia y la falta de trabajo empujaron a una parte de mi pueblo a saquear supermercados y expendios de alimentos; los saqueadores no eran de un color determinado, estaban todos subidos a las góndolas tomando lo que podían, pero también se los considera "diferentes"... eternamente diferentes: "Cabecitas Negras", "Marginados", "Villeros", "Clase Baja", etc., etc.
¿Será tan difícil comprender que bajo ese mote hay un ser humano?, ¿Por qué se hacen tantos esfuerzos para remarcar diferencias a todas luces inexistentes? Y últimamente estos esfuerzos se están haciendo desde las políticas del gobierno, como para no dejar dudas que nuestra sociedad ¨debe¨ ser discriminativa.

En la época de la conquista Española se esclavizaba al negro porque éste, al decir delos esclavistas, no tenía alma, considerándoselo un sub-humano. También se sometía al aborigen, porque pese a que éste sí era considerado humano... tampoco tenia alma...
¿Qué diferencia hay entre estas afirmaciones y las del ministro de economía que dice necesitar diez mil pesos por mes para vivir y obliga a los jubilados a hacerlo con ciento cincuenta? ¿No es el equivalente a decir que el ministro es humano, por eso tiene derecho a vivir con el mismo dinero que reparte entre más de sesenta sub-humanos jubilados...?

Si por estos días vemos cualquier noticiero, nos enteraremos que el nivel de conflicto que se ha alcanzado en nuestro país no dista mucho de aquel de Los Ángeles de 1965:
Los portuarios están de paro por la competencia desleal de la mano de obra en negro, ignorada adrede por el estado, los estatales de La Plata de paro por falta de cobro en sus haberes, los maestros de muchas provincias no dictan clases porque tampoco cobran, los estatales de Jujuy llevan setenta personas heridas en manifestaciones solamente en esta semana, los jubilados llevan más de ciento sesenta marchas al congreso pidiendo un haber mínimo veintidós veces menor que los diez mil del ministro Caballo, hoy la dirección de trabajo "encontró" un obraje con mas de cincuenta hacheros en condiciones infrahumanas, en las que vivían cincuenta y dos eclav... perdón, "trabajadores", treinta en esta región quedan fuera por día solo en el rubro de la construcción, y la lista se podría seguir por varias páginas: Sube el Impuesto al Valor Agregado, doce mil negocios minoristas cierran por mes en el país, los combustibles aumentan y la deuda eterna, (perdón: externa), en estos días crecerá gracias a un “préstamo” muy generoso que nos darán para cancelar intereses con los mismos prestamistas, en algo así como once mil millones de pesos más (unos trescientos treinta pesos por habitante, o sea que perdimos el equivalente a mas de dos meses de jubilación solo en esta transacción, triste destino el de mi hija que con seis meses de vida prenda su vejez, porque eso ocurrirá sin dudas, dado que en los últimos veinte años la deuda eterna no deja de crecer)
Las empresas estatales ya no lo son y las que quedan van camino a no serlo... es mucho.

Tal parece que la idea es crear conflicto, y esa tónica no cierra si no se piensa en reprimir, la represión es la segunda etapa del proyecto neo-esclavista, contención a palos, total son casi animales a los que se garrotea, son sub-humanos que reaccionan tal cual lo previsto en la historia, ¿ o los esclavos no defendían de agresiones a sus amos, (en muchos casos), Moisés en su éxodo a la tierra prometida era cuestionado porque allí en el desierto se temía al hambre, como si no se pasaba hambre antes de partir...?

Temo por el violento futuro si los tiempos no cambian, temo por el hambre de mi pueblo, y con tantos temores ¿cómo haré para no inquietarme en mi trabajo, para realizar una tarea, si en el futuro mis herederos o yo padeceremos los flagelos de un sub-humano?.
Sin escuela, sin salud, inseguros sintiéndonos un enemigo que perdió una guerra, donde las condiciones de rendición las negoció un mercader incapaz de diferenciar entre las estadísticas de muerte por accidentes aéreos o la muerte de su propio hijo en un accidente aéreo...


30 de marzo de 1995