Considera que la razón de existir
de este pobre loco
radica solamente en sentir tu vibrar.
Considera que el recordar
la paciencia de tus caricias
anima nuevamente mi austero pasar.
Considera que tu reir
prende fogosamente
el tiritar de mis sentidos.
Considera que tu mimar
calma hasta el más profundo
de mis latencias.
Si consideras lo que mis
sentimientos claman
sólo así seguiré vivo.
Texto agregado el 10-03-2005, y leído por 117
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