Escucha,
despacito,
despacito…
Con los sesos contra la pared y el alma en el culo.
Shssss,
que nadie te escuche,
que nadie lo sepa.
Baja los pulsos a cero,
casi en coma,
casi como siempre.

Y convertite en guru del silencio.
Ignora las moscas en la nariz.
Repetite cien veces que estas bien.
Babea con estilo y anestesia la conciencia.

La martingala de la vida y la teoría del caos.
Ta, te, ti, los locos en el asilo fumando cigarrillos armados.

Eso es la muerte.
Otra conspiración.
Otra injusticia.
Otro que se va.
Algo con errores de imprenta
en la sección deportiva del diario.

Y vos estas en lo mismo
que las cucarachas.
Buscando el nicho.
Manteniéndote a salvo.

Ahora ya sabes.
Es todo lo que hay en el lavadero del alma.
Y Dios no esta.
Y mi viejo se va.