La tarde esta caliente Como fuego es el aire Mi cerebro me exige ideas refrescantes Recuerdo su dulzura Su jugosa abertura La avidez de mi lengua Buscando su hendidura Daría yo la vida por penetrarla toda Por hundir la cabeza Entre sus carnes rosas. No penséis nada raro No es una guarrería Mi objeto de deseo Es…una simple SANDIA
Texto agregado el 07-03-2005, y leído por 359 visitantes. (10 votos)