Sombría noche de látigos infernales
ahuyentan mis sueños del inconsciente
cuando una lucida memoria florece de lo profundo
el insomnio hace a que la escritura me tiente.
Trajes negros cubren la luz de la llena
y las gargantas empiezan a desafinar
el llanto despavorido,
la naturaleza a empezado a criticar.
Ya era hora que la Madre reaccione
y que a los culpables
nada les perdone
que las aves empiecen a ladrar
y las vacas empiecen a graznar
que la jauría de peces empiece a aletear
y el cardume de gatos sus garras afilar.
Es la rebelión de lo absurdo
como cuando muchas personas pensaron
que botar un papel no causaba ningún daño
y ocupemos más combustible
para comprar autos del año
y derrochemos el dinero
en fabricas y cosas desechables
y no lo ocupemos en soluciones
que es algo inalcanzable,
un papel en la calle
un poquito de CO2
que nos va a hacer mal
solo un poquito de tos,
es para ser mas desarrollados
nada del otro mundo
solo critican por lo correcto
eso si que es absurdo,
más tala de árboles
más patentes hay que permitirse
al final y al cabo
de algo hay que morirse.