El Trece
No, no se confunda señor, que no le engañe mi forma de vestir. No soy nada supersticioso, ¡que se lo digo de verdad, creame!. Es una tontería eso de las supersticiones ¿acaso ve que lleve algún símbolo religioso?.
No, eso de las supersticiones lo dejé hace mucho tiempo, pero parece que fue ayer. Mi trabajo me costó y lo tengo muy presente, tal es así que he tenido esta misma conversación con una docena de personas esta semana y todos me decían lo mismo que usted cuando me veían. ¿Qué tengo un aire a Bela Lugosi?. Pues parece que muchos coinciden, se lo agradezco, Bela fue uno de mis ídolos cuando era niño, recuerdo que me comía literalmente las películas de Boris Karloff, Bela Lugosi, Christopher Lee, Peter Cushing, Vincent Pryce, y algunos otros mas que impulsaron el género de terror. He de reconocer que me asustaban un poco, pero sin duda ayudaron a formar en mi una idea clara de los miedos y supersticiones de la humanidad, y por otra parte influyeron sobre mi de tal forma que a la vista está mi estética personal. Ahora le llaman estilo Gótico o Dark, y algunos iluminados de la ultima hora le llaman satánico. Ya ve hay opiniones para todos los gustos, lo mío es mas personal, sabe usted.
No, no, no soy un producto de los medios de comunicación, ni mucho menos, lo mío trasciende a todo eso. La única aprensión que tengo, que no superstición, es la de no pisar las rayas de las aceras, ya conoce ese refrán que dice: Quien pisa raya, pisa medalla del niño Jesús muerto en la cruz. Y no queremos tener mala suerte ¿verdad? Cuidado, creo que está pisando la fila de baldosines negros, eso, apártese un poco no sea cosa que le traiga mala suerte.
Si, la cosa últimamente está muy mal, ¿me lo va a decir a mi?. Sin ir mas lejos, míreme a mi, tengo un montón de problemas para llegar a fin de mes. Y problemas serios, que no se vaya a creer usted que son triviales, mis problemas rayan en las necesidades más básicas.
Si, lleva razón me debería levantar antes, pero es que a mi me gusta la noche, sabe, me estimula mucho mas. Por la noche creo que se perciben mejor las cosas, los instintos se despiertan y las conciencias se adormecen.
Bueno, señor, no quiero entretenerle mas, me cae usted muy simpático y me deja un gran recuerdo de esta charla, pero es que voy a tener que irme, me esperan unos amigos para darnos una vuelta. Espero que me sepa disculpar y entienda que la vida me ha hecho así, ahora si no le importa ¿le puedo morder el cuello?, es triste pedir pero es mas triste robar para ....... alimentarse y ¡Cuidado con la raya! No vaya a ser cosa que nos traiga mala suerte.
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