Por un minuto pierdo la vida,
por un minuto pierdo el control,
por un minuto no veo resultados y sólo destruyo mi amor,
la música se detiene se escucha un piano
mi corazón se estremece,
mi garganta explota en mil y ya no controlo el llanto
el odio el amor, el bien y el mal
todo se mezcla para hacer sentir dolor,
dolor infinito de mi sangre perdida.
Llévate mi dolor
dáselo a los pobres
bésame
cuéntame una historia de amor
algo que me haga sentir mejor
este niño cegado
"el abismo de la agonía"
Creo saber hacia donde me dirijo
al parecer hay una colchoneta abajo
vivo con la agonía de verme caer,
(darme cuenta)
estoy colgado de una rama
de un árbol plástico que flota en mi pecho
se quien soy
sólo que no se con quien estoy
animales en mi cabeza
lo que pasa es que suelo confundir mis sueños con la realidad
y al despertar me doy cuenta que me encuentro en un desierto de lodo,
en una ciudad destruida con un metro hacia la nada.
Me sostendré bien,
ya no del árbol plástico
sino de mi brazo
creeré que existe el humano en este país,
reiré con mi alma
comprenderé el amor y sentiré la alegría del saber.
A veces me incieto en la locura y actúo bipolarmente ,
aun así logro mezclar las rivalidades
creo saber donde esta el cielo,
la calma me mata
el sudor me emborracha,
mi cama quieta:
mi amiga
mi mamá,
sabe atender una sombra más.
Nada es tan malo
siempre queda algo que conseguir algo que aprender,
algo porque vivir, la realidad decae, sólo nos queda nuestra esencia. |