Aun no sabía,
de la existencia de tus mundos:
curiosa mezcla de emociones encontradas.
Ideas vagas en escasa concordancia
con mis creencias perfectas.
No hubo consultas.
Destino sin pertenencia
arrebatado por otros,
te fue negado.
La luz de la luna en tus ojos
fue presagio suficiente
esperaba por tormentas
amenazas no reales.
Solo lágrimas,
contenidas en un papel.
Tinta desplazando a la sangre.
Sutilmente.
Texto agregado el 23-02-2005, y leído por 202
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