Había una ves una jovencita, que tenia una mama que quería no mejor para ella. Su Papa las abandono cuando ella tenia dos anos. Nunca vio a su papá desde es día. La jovencita creció con nada más una madre. Tenia las mejores calificaciones en su escuela, jugaba fútbol, cantaba en la iglesia, y era la mejor hija que una mama pudiera pedir. No tenia muchas amigas, porque sabia que su mama trabajaba mucho para tener lo poco que tenían. Nunca tubo novio, y siempre ayudaba en lo poco que podía. La niña era muy Hermosa pero no usaba pinturas, y siempre usaba roba usada.
Un día caminando a la escuela se le cayeron todos sus libros, un joven la ayudo a recoger sus libros. Le dijo gracias y comenzó a caminar muy rápido. El niño correo a ella, le pregunto porque tenia miedo. Comenzaron a hablar, cambiaron números, y desde es día hablaban todos los días, sin que su mama notara. Se enamoraron, fue su prime, y ultimo novio.
Eran novios por un ano, sin que nadie notara. Sus calificaciones todavía estaban superiores que a los temas, y todavía jugaba fútbol. Nada cambio, era la misma que siempre. La niña odiaba que tenia que esconder algo de su novio. Cuando cumplieron un año de novios, tuvieron relaciones.
Se embarazo, y no sabia como decirle a su mama. Le escribió una carta. Cuando su mama la leyó, no paraba de llorar, no sabia que decir, no le hablaba. El niño la soportaba cien porciento. Su mama se canso de trabajar para que su hija le delvoliviera con eso. Le dio dinero, y la correo de su casa. Su novio trabajaba y tenia un poco de dinero, se movieron a un apartamento. A los nueve meses tuvieron una niña Hermosa. Su abuelita nunca la fue a visitar. La niña estaba triste que ya no tenia el amor de su madre. La familia trabajaban mucho para mantenerse. A los anos después compraron una casa, meses después estaba embarasada otra ves.
La mama de la niña tenia mucho orgullo. Nunca fue a visitar a su hija, pero cuando su hija se iba a trabajar la mama iba a visitar a sus nietos. Y escondía dinero en su casa para que tuvieran dinero para mantenerse. La niña estaba muy confundida del dinero mágico de aparesia. Un día la hija mayor le contó que una señora iba a jugar con ellas. La niña sabia inmediatamente quien era.
Una día no fue a trabajar y mando a sus hijos con su suegra. Se quedo en la casa. Su mama llego y estaba sorprendida. Se quedaron calladas, y corrieron y se abrasaron. Hablaron por horas de sus errores.
Debemos comprender que somos humanos y cometemos errores, y tenemos saber como controlar nuestros sentimientos y tratare de ayudar a sus amados.