Invanden ganas de cubirme de ti. Huye. Desvanece. Dejame danzar en colores, reflejados en aguas de rojo sabor. Empachar de fantasia sonidos que atontan movimientos de magicos destellos. Remojarme en torbellinos de musas abiertas ante ti, delirando ante la compasion que exigen sus ojos. Deja, a mi ser, de maravillas vestirse. .Deja conocer.
Texto agregado el 01-02-2005, y leído por 115 visitantes. (2 votos)