Usted!!

La primer hoja de este cuaderno.
La primera y última vez que escribiré para ti.

No se porque lo hago.
No entiendo aquel impulso que me tiene acá sentada,
escribiendo para ti…
Escribiendo no se porque para usted.

Tal ves influye el que haya visto su silueta esta tarde.
Tal ves influye, el que sienta dolor y rabia por su presencia.
Tal ves influye, el que alguna vez reposada en mi cama,
mis lágrimas hayan tomado su rumbo por mi rostro
y hayan bajado sobre él, con dolor por usted. Por su vida…
Dolor por su mirada y todo aquello malo que le ocurría.

Mi corazón no quiere cerrarse ni volverse duro ante su mirada.
Ante su sonrisa. Ante su respirar en esta tierra.
No quiero negarle mi apoyo cuando mas lo necesite;
Ni tampoco darle la espalda, cuando su cosecha le muestre lo malo que ha sembrado.
No quiero rechazarlo, ni hacerle un mínimo daño;…
Aunque comprenda que lo que menos le importa es mi vida,
Y la de los seres que a mi lado respiran.

No me importa su vida ni su trabajo ni su lucha ahora.
No quisiera tenerlo presente en mi mente ni tener que repetir su nombre,
cada vez que le diga te amo a mi mas grande amiga.
Cada vez que con mis manos toque sus lágrimas y las seque…
Y comprenda que la gran raíz de su tristeza y desilusión,
proviene de usted.

No quisiera recordarlo siquiera…no por ahora ni por mucho tiempo.
…pero aunque no pueda mirarlo con los mismos ojos…
Y aunque tampoco pueda decirle ahora que lo estimo,

No puedo odiarlo.
No puedo llenarme de rencor ni de profundo resentimiento por usted.
Porque su padre es mi padre.
Y su dolor, también es mi dolor.


Nunca se metió conmigo…igual, es algo que no me inquieta.
Nunca me humilló ni me lastimó mirándome a los ojos…
Pero sí a mi sangre. A mi hermana.
A mi tercera mayor inspiración.

Su dolor también es mío porque la amo.
Y sus lágrimas son parte de mí, pues mi corazón se une a ella y comparte cada visión. Cada concepto. Cada trazo…cada ilusión.

Su vida y sus manos se juntan a mí.
Sus metas y sueños,
A su lado quiero cumplir.

No quiero la lastime más. Ni una lágrima demás,
por usted vuelva a tener vida.

Sus palabras y su tiempo
Alguna vez me dieron amor.
Pero usted mismo, con sus actos y su corazón,
se ha encargado de matar ese amor que alguna vez me brindó.

Nunca llegará a sus manos este poema.
De nada serviría, sus ojos lo leyeran.
Tan solo se quedará conmigo aquí.
Hasta que muera esta cólera profunda por siempre.

Usted mientras tanto seguirá viviendo.
Y jamás conocerá, que fue usted quien provocó estas letras.
Sus lágrimas y sus pasos en vano, ya no dejarán huellas.
Ya no pretenderé caminar como usted, como alguna vez lo había anhelado.

De haber sido así,
habría dejado de apreciar hace algún tiempo lo esencial,
y habría dejado de mirar con amor, aquel ser hermoso y precioso,

que usted nunca valoró.





11:58pm
Martes de un enero18
2005