Empecé a sospechar anoche, mientras leía… una página de mi libro doblada a modo de marca. Yo nunca haría eso. Después, incomprensiblemente tardé demasiado en dormir, no podía quitar de mi cabeza aquel doblez en la esquina superior de la página de mi libro. Hoy no me he levantado bien, me pasé la noche soñando con unos seres extraños que plegaban las esquinas de todas las páginas de todos mis libros… No pude desayunar donde siempre, nunca me fié de ese camarero; quizás fue él; ayer, en algún descuido mientras tomaba café… En el trabajo no hice más que vigilar mi libro; si el doblador de páginas de libros… (podría decir pagefoldbook, pero no me da la gana) se encontraba en esa oficina y volvía a intentarlo, lo descubriría… Ahora estoy casi seguro de quien es la responsable; mi asistenta se fue por las ramas cuando la interrogué; se excusó torpemente diciendo algo de vivir solo y volverse loco… Tendré que tomar serias medidas…