Sábado en la tarde.
Tu recuerdo habita cada rincon de mi mente.
extraño tu sonrisa, tus ojos.
esa forma unica de decir mi nombre, reinventado en tus labios.
Mis temores gritan desesperados .
No puede ser.
Temo a ser de nuevo feliz. temo de nuevo sufrir
Tu presencia ha cambiado mi vida.
No se si es amor. Aun no lo creo.
Pero es algo nuevo. Algo raro, algo que tambien causa estragos en mi mente, en mi alma.
Me duele pensar en tu ausencia y en los cortos minutos que pasamos juntos.
Me duele tener miedos.
me duele que los tengas.
Aun así, quisiera cambiar las ilusiones pasdas por un sorbo de tus labios, por un instante de tu felicidad
por esos ojos que se encienden como brasas al mostrar un poco más de esos secretos que aun no merezco me confíes.
No sé si lo podremos lograr.
Solo sé que tú ya estas en mi alma, en mi ser.
Sé que no es el mejor regalo, pero es lo que tengo para darte.
Ojalá no te canses de mi, de un hombre con alma de niño temeroso.
Ojalá tu alma también tenga un rinconcito para mí.
Ojalá este cataclismo que has generado en mi ser no pare, no se detenga jamás.
Ojalá podamos vencer nuestros miedos.
Ojalá esto crezca y se transforme en lo más grande: Nuestra propia historia.