No lo soy,
porque no me interesa lo que digas,
no busco que me entiendas,
ni que comprendas mis versos,
no me apropio de la métrica,
de la asonancia o consonancia,
ella se ajusta a mi.
Soy anti-algo, anti-alguien,
si criticas mis versos por su estructura,
por su orden, estás errando el camino,
pues mides con una vara con la cual no deseo ser medido.
La única crítica que es válida,
es si mis palabras son o no de tu agrado,
si he logrado entregarte mi sentir.
Mi alma se estructura en caos absoluto,
sin orden, como el esparcir de estrellas,
yo sólo escribo eso,
como si arara la tierra,
despejando las piedras y orillando la ortiga...
No busco consejos,
no los necesito, no busco darlos,
pues no los necesitas.
La poesía es la expresión de tu alma,
no puede ser encasillada
y si buscas orden,
no vivas,
no existas,
tan sólo muere.