Todo esta oscuro. Se siente calido, pero agradable. Estoy completamente mojado ( sudor supongo).
Hace un rato ya que intento desenredarme; soltarme de estas ligaduras y no lo logro. Pareciera que cada vez que me muevo me enredo mas. De pronto noto una salida, una via de escape ( porque aunque no me siento encerrado lo estoy). Me da miedo salir, pero al mismo tiempo me intriga lo que hay afuera; pero a pesar de mis intentos no me puedo desatar. Mi instinto natural me indica que debo irme pero mis fuerzas no son suficientes.
De repente parece como si el cielo se abriera ( aunque bien podria tratarse del infierno) y aparecen un par de manos que me sujetan amable pero firmemente. Me liberan y me sacan de donde estoy. La potente luz de la habitacion me ciega, por lo cual no puedo distinguir a los que se encuentran a mi alrededor. Tampoco puedo entenderles porque hablan todos al mismo tiempo y en un idioma que apenas me es conocido. El miedo se apodera de mi; lo unico que atino a hacer es llorar amargamente.
A partir de ahora me llamo Tomas. Por suerte para mi familia y para mi, la cesarea fue todo un exito.
dedicada a mi amado hijo Tomas
Texto agregado el 12-01-2005, y leído por 342
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Lectores Opinan
06-05-2013
uy hasta me emociona leerlo
giany
29-04-2013
Buena descripción de la llegada a este mundo!!!****** nanajua_
24-10-2011
Es un texto "sofocante".Creo que has logrado describir el momento del nacimiento y también el momento final...al que tanto tememos. filiberto
07-07-2005
Me hiciste recordar la segunda vez q di a luz, mi hijita tenía doble circular de cordón !! pero felizmente todo salió bien, sin cesárea ni nada. Lindo tu relato Isamar