I

Cuando creí muerta mi soledad
Fue el momento de tu llegada,
El amor se hizo realidad
Alimentado por tu mirada.
Hoy se convirtió en maldad
Seguido de tu largada,
Siento mi pecho henchido
Pero de dolor y del puro llanto.
¡S! lloro por no tenerte
Ahora que te quiero tanto,
Siento no poder entenderte
Te has ido de mi lado,
Dejando mi alma inerte
Y el corazón destrozado;
Queriendo ver y sin verte
Como pecador sin pecado
Cierto, muy cierto es
Que juré no volver a llorar,
Y mira que si he llorado,
Que no sufriría otra vez
Y miren lo que ha pasado
Hablé y el que habla se equivoca,
Como me equivoque yo
Por haber abierto la boca.

II

Mi alma esta perdida
A la espera de un querer
Que no se dé la partida
Como el tuyo se fue ayer.
Siempre te recordaré
Como alguien ambivalente
A quien no supe retener,
Al igual que me dio la vida
Hoy significas mi muerte.
Tanto que me quisiste
Sin darte cuenta me heriste,
Herida de cuerpo y mente
El mismo día que te fuiste.
Dicen que no lloran los hombres
Pero como me desahogan los ojos
Llanto a llanto, llorando tu nombre,
No lloran lágrimas de sangre
Pero un río torna rojo,
Rojo de coraje, de amor de locura.
Quizás la conciencia te arde
Al contemplar mi llanura
Y tendrás que llorar por cobarde,
Dañaste el amor, mi amor
El que te entregue con ternura
La vida es así
Como una piedra, muy dura
Vivir es por esa piedra sufrir,
Es caminar a oscuras
Tratando de huir
Buscando la claridad
Y con la misma piedra de siempre
Nos volvemos a dar.