Era sé una vez una mañana de enero, el frío se hacia presente en toda la casa y él solo deseaba permanecer ahí, en la cama. Había pasado la noche bebiendo, intentando borrar viejos recuerdos y nuevos fantasmas.
Se quedaba observando su cuarto y veía que todo permanecía en el mismo sitió, no se... pero eso le daba una cierta seguridad. Desde el rincón donde se encontraba podía ver toda la habitación; su armario, su ordenador, su mesita, ...
Recordaba perfectamente lo que había hecho esa noche, tal vez porque siempre hacía los mismo. Sabía que podía seguir así toda su vida, la pregunta estaba si el quería continuar con eso...
Ansiaba algo, tal vez fuera su porro mañanero, tal vez esa coca-cola fría que le esperaba en la nevera, tal vez ella.. Sí, Ella. Siempre estaba presente en él su recuerdo. A su lado su vida era más fácil, se pregunta que sucedió, porque acabaron así, casi sin hablarse... Pero esa pregunta cada día se la formulaba y siempre acababa en un silencio. Añoraba tanto sus caricias, sus besos, su sonrisa y esas noches que se quedaban abrazados después de hacer el amor.
Después de ella han pasado muchas chicas por su vida, tal vez fueron tantas porque siempre buscaba a Bea. Aún cuando escucha su nombre se estremece, es curioso aunque no está ella, nota su presencia. Tal vez porque ya forma parte de él.
De repente nota un peso en su cuerpo que sube hasta su cara, es su fiel e inseparable gato. Se ha convertido en alguien muy importante para él. Le hace sentirse menos solo y le calienta en las noches frías de invierno. Siente que el nunca le defraudará y en estos tiempos eso ayuda mucho. Mira ahora a su alrededor y comprueba que de alguna manera u otra la gente le ha engañado. Y se pregunta porque son tan hipócritas, porque se engañan e intentan dar una apariencia que no son. Y ve que no hay nada justo, por eso muchas veces recurre a la venganza “Si me lo haces, bien ahora yo te lo haré a ti”.
Necesita acallar las voces que están en su cabeza, necesita dormir y descansar. Por eso se levanta penosamente, se dirige hacia la cadena de música y pulsa el play , y cae de nuevo en la cama. Siente que cada parte de su vida son canciones que ya están escritas, se las sabe de memoria porque hablan de él; de sus sentimientos, de sus batallas, de sus perdidas, ..Pero sabe que hay muchas canciones que están por escribirse.
Sus ojos caen y se queda durmiendo, espera soñar alguna vez más. Una lágrima se desliza hasta sus labios secos y eso le provoca una sonrisa.
“ La vejez se apodera de mis sueños, el cansancio derrota la caricia, ya no tengo fuerzas para caminar, solo me queda la esperanza, el sol se esconderá, la luz se apagará y el tiempo me hace esclavo de su final".
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