El frío húmedo de las 5 se manifestaba en forma de resplandecientes gotitas de agua, que podían observarse en las largas hojas verdes del pelo de chancho.
El barrito proveniente de las primeras lluvias tempranas invadían por doquier todo lo que estuviera a su alcance: botas bombachas, la campera engrasada y hasta el recado.
Que fría estaba la tranca del tranqueron… pero que lindo abrirla hacia el futuro.
El matungo bufaba y el humo de la nariz le hacía recordar a uno que el otoño estaba presente en todo y en todos. ¡Cuantos terneritos nuevos hoy!
Al mirar la alameda del costado del camino, experimentaba una felicidad difícil de explicar, encima de mi yegua, mi tierra, mis animales, mis plantas, mi historia, ¿Qué algo mas podía pedir?.

…Sin embargo nada era así, y todo es una caca.
El caballo viejo y desgastado, el recado pedorro de 70 pesos que se daba vuelta porque el matungo afloja la verija. El tabaco húmedo.El puto camino todo hecho jirones porque el tractor tenia que pasar cada dos por tres a arreglar la entrada inundada todo el tiempo. Los alambres hechos mierda, el eléctrico que se descarga todo el tiempo porque se parten los palos. Los toros que sirven a las vacas y la paricion se desestaciona toda.
Las vaquillonas parturientas de toro robado que no pueden parir. El kilo del ternero que se derrumba y el crédito al sector se vuela por encima de las nubes. Y encima al sol lo veo solo en las peliculas!!

Pero siempre cabe una reflexion para estos momentos:

QUE LINDO EL CAMPO Y LA PUTA QUE TE PARIO!!!