9:30 am.
¡Hoy desperté con unas energías gigantes de ir a la playa!... pretendo llamar a Cristóbal para que me acompañe junto a Sofía... ¡ella lo adora!, y yo también lo hago... tal vez después podríamos pasar a ver a mi madre, y llevarle un hermoso ramo de rosas blancas... ¡siempre le han gustado!... además ya nadie la visita, mis hermanos se olvidaron completamente de ella...pero yo nunca lo haré... además no me gustaría que cuando muera mi pequeña Sofía haga lo mismo.
12:00 pm.
Ya tengo todo preparado para salir... ¡estoy muy emocionada!. A Sofía le puse su nuevo vestido rosa...¡parece una verdadera muñeca!... su padre estaría deleitado con sus ojos... ¡se parecen tanto!... pero él no está aquí, está en otro lugar ¿será un angel?...¿una estrella?...no, creo que un angel. Así cuando ella lo conozca él expandiendo sus enormes alas blancas la apretará contra su pecho y por fin podrá contemplar a su hija...la hija que estuvo esperando por tanto tiempo...
pero... ¡ya basta de recuerdos!
¡oh! creo que ahí llegó Cristóbal...
2:30 pm.
Nuestro trayecto hasta la playa fué muy cansador... ¡el auto se averió después de media hora de viaje!... pero que más se le puede pedir a un pedazo de lata como ese... ¡creo que ha sido la herencia de generaciones!... en fin, después finalizamos el recorrido caminando, a pesar de que el sol nos golpeaba la cara de una manera espantosa.
Nos falta poco para llegar...
3:50 pm.
¡Por fin estamos frente al mar!... y es verdaderamente hermoso... a pesar de ser un día tan caluroso no hay tanta gente...
A unos pasos de la playa encontramos un buen y barato restaurante, ahí estuvimos comiendo algunos productos del mar...¡ que por lo cierto nunca me han gustado!... pero aquí no tenemos comida rápida ni mucho menos, así que no puedo exigir demasiado...
¡oh no!... ¡Sofia se manchó su vestido!...
4:30 pm.
El sol quema impresionantemente nuestra piel, por eso le estamos aplicando una torre de bloqueador a Sofia... Ella está intentando escaparse de nosotros para meterse al agua, pero aún no sabe nadar... aunque yo tampoco sé, bueno, es una pequeña niñita y no puede ir sola... además acaba de comer.
Al lado de nosotros se encuentran dos señoras con unos kilos de sobrepeso... se han encargado de hacernos sombra desde que llegamos, una de ellas tiene puesto un gorro rojo gigante, y desde hace un rato que estan peleando... aunque no puedo notar muy bien por que razón, pareciera que fuese por el último pedazo de pastel que una de ellas había empezado a hecharse a la boca...
5:15 pm.
Ahora el clima se siente mucho mejor... ya es cálido y el sol nos trata con delicadeza. Las ancianas y los niños reboltosos comienzan a irse lentamente, y la marea ya está en calma, así que quizás podamos ir un poco al agua...
Desde este lugar se vé todo tan hermoso... tan distinto... siento que a ratos el mar intenta decirme algo, de transmitirme un mensaje oculto... y que el viento tibio roza mis brazos con una suavidad deleitante... pero entonces abro los ojos y veo que Cristobal y Sofía me están llenando el cuerpo de arena... ¡que horror!... me enojo unos minutos pero Cristobal me golpéa con un agradable beso que me es imposible rechazar. Mientras que la pequeña se ríe a nuestro lado de las señoras gordas en traje de baño... ¡ su risa es tan dulce... tan ingenua y pura!...
6:30 pm.
Ya nos estuvimos bañando un rato. Sofía quiere seguir en el agua, pero no queremos llegar tan tarde a casa... además con el auto averiado tendremos que buscar otro tipo de transporte.
Este día ha sido maravilloso...a pesar de las dificultades que sufrimos al principio. Me comienzo a sentir amada, protegida... sé que se me han quitado muchas cosas a lo largo de mi historia, pero esos episodios se han transformado en fragmentos, imágenes abstractas que intento dejar atrás...
Empezamos a secarnos y a sacarnos la arena que manteníamos pegada al cuerpo, pero...Sofía... ¡Donde está Sofía!...
-¡Cristóbal... dime donde esta Sofía!...
entonces, hecho un vistaso al mar... y la veo. ¡ La nena estaba en el agua!... entonces mi mente se bloquea, ¿que hago?... ¿grito?.. ¿lloro?... ¿corro?... mi reacción es hacerlo todo. Comienzo a insertarme en el mar sin nada más en mi cabeza que la imagen de una muñeca con un vestido rosa... entonces diviso su fragil cuerpecillo... Cristóbal se abalanza presurosamente hasta él, pero pareciera que ella no respondiese... cuando logra tomar uno de sus brazos la acerca rápidamente hacia la orilla .Sus claros ojitos tenían un aspecto desorbitado, y su cuerpo se mantenía inmóvil... pero sus delgados labios estaban susurrando un par de palabras sin sentido, frases al azar encontradas en una mente débil e inocente...
La gente de la playa se arrima a ver el espectáculo, se encuentran alrededor de la niña formando un círculo... sus caras me comienzan a parecer horribles, sus cuerpos son de mounstros, fantasmas que rodean a mi hija para llevársela lejos... uno de ellos se se agacha para tomarla... para quitármela... ¡ entonces grito!... ¡ grito como una desesperada!... ¡el mounstro comienza a presionarle el pecho fuertemente!... entonces Sofía vota un líquido por su boca... ¿agua?... ¡ es agua!... pero aún así no reacciona. Mi cuerpo está completamente paralizado... ya había perdido a mi madre, a mi novio... ¡¿y ahora a mi hija?!.¿Tanto me odiará Dios?... no, no lo creo... además dificlmente existe, si así fuera no permitiría tanto sufrimiento en una sola persona...
Cristóbal me mira fijamente, se encuentra sentado junto a Sofía.Yo solo lloro... ¿Este era el día más feliz de mi vida?...
Entonces la pequeña me mira y dice:
- Mamá... mi vestido rosa está mojado...
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