Cuando despertó, el dinosaurio seguía ahí.
Miró el reloj y se dijo "cinco minutos más".
Cerró los ojos pero el ronquido del dinosaurio no lo dejó dormir.
Se cubrió los oídos con la almohada y fue más atrás en su memoria.
Ya no estaba ahí cuando el dinosaurio despertó.
Fin
Nota: Tal vez olvide aclarar lo siguiente...
"El texto aquí publicado es una respuesta al 'desafìo' lanzado por Moebiux en el foro Fractal (en Cuentos Super Cortos), a partir del célebre microcuento de Augusto Moterroso que constituye la primera línea del presente texto".
Simplemente eso, para evitar especulaciones que no se corresponden con la verdadera intención de este escrito.
Texto agregado el 19-12-2004, y leído por 883
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Lectores Opinan
25-06-2009
Muy bien tienes vena, me gusto lo del arbol de tu registro, sabes el titulo mas hermoso que he leido es Los arboles mueren de pie de Eduardo casona... saularte
10-01-2009
jajaja, muy buen uso del cuento de Monterroso. habría que lanzar otro desafio, esta vez con el cuento El rayo que cayó dos veces en el mismo lugar (es más largo el nombre que el cuento)
Muy bien logrado el propósito! Dhingy
16-11-2008
Primero paso por los escritos del guatemalteco y vuelvo... chiiaoo! cesarjacobo
19-09-2008
¿¿¿¿¿????? me falta cerebro para entenderlo
andromaco
19-11-2005
Muy bueno. Escribir así un cuento tan acotado no es moco de pavo. castillo