Corazones apáticos latiendo por inercia y que toman un tren con desgana. Corazones fríos, corazones sin un mañana. Corazones sin ideal, ni migaja de sentido. Corazones infectados de indiferencia y desprecio. Negros corazones necios. Miradas de odio, palabras con fin de cuchillo; actitudes hirientes y otros líos: corazones sin gota de brillo. Ya degradado en un rincón un féretro pequeño: la paz, el amor y la vida; la humanidad, la libertad de nuestros sueños. Corazones escarchados de mierda tan hundidos en su miseria, tan orgullosos de sí aunque ninguno es feliz. Tontos corazones necios y sin embargo... tan nuestros!.
Texto agregado el 15-12-2004, y leído por 450 visitantes. (1 voto)