Ideas Para Cuajar: EL PESO DE NIETZSCHE ENTRE NOSOTROS

EL 15 de octubre, Nietzsche celebraría su cumpleaños n° 160. Cuesta encontrar manuales de la historia del pensamiento filosófico que aborde a Nietzsche con detenimiento más allá de un par de referencias, ya que este es considerado como un tipo que revoluciona el pensamiento occidental tal vez por su formulación deicida “matando” a Dios.
Hace unas semanas una amiga me envío unas notas respecto al tema de quienes somos realmente o bien, si es que en definitiva uno no es, sino que esta siendo permanentemente, y esto a propósito de la tragedia de Shakespeare, Macbeth y mi articulo sobre éste.
¿Qué somos? ¿Para qué somos? ¿Cuál es el sentido?. Estas preguntas poco originales deben remitirse a los orígenes de la Filosofía, tratadas por una lógica aristotélica y tomista hasta que llega nuestro aguafiestas y amigo Friedrich Nietzsche.
Vamos al grano y sin ser un estudioso quiero invitar a seguir el dialogo remitiéndome a mis notas, para pensar y cuajar algunas ideas.
Este alemán parte sus estudios y su inquietud por ir al origen de la “Tragedia Humana” y enuncia en los griegos, padres de la tragedia como genero, que ésta se celebraba en honor al Dios Dionisio (Baco para los romanos) rey de parrandas y del vino; esta celebración era cantada (ditirambo) por el coro de bailarines serio y erigiendo la epopeya. Contradicción vital ya que nace en honor al Dios de la Fiesta y sus celebrantes lo hacen de una forma seria y formal: El coro es el interprete del ser (esencia de las cosas, qué somos), que juega con las apariencias, el lenguaje del ser de la voluntad oculta en el individuo es la música – hay un libro de Octavio Paz que manifiesta que el lenguaje por excelencia inmanente es la música- .
Según Nietzsche la Tragedia griega transforma la condición Humana: los cantos y bailes del coro ponen de relieve la crueldad del ser; los espectadores gozan con lo que sucede en el escenario y por ende aceptan su revelación. Ahora por qué desaparece tan rápido la Tragedia griega: porque el dialogo reemplazó a la música, y el héroe reemplazo al coro, y al suprimirse la música, la verdad irracional de la condición humana quedo en las tinieblas. La tragedia así perdió su razón de ser. Se supone que fueron lo griegos los primeros en ver el vacío de la existencia humana; entre guerras con los Persas (medicas) amenazados por éstos, los helénicos debieron escoger entre dos males: el militarismo o la derrota, necesitaban un remedio instantáneo y la Tragedia se lo suministró. Los peligros eran los excesos del estado (la democracia y sus formas de ciudadanía- Apolo dios del estado-) y los excesos de la libertad (libertinaje, excesos dionisiacos).
Ahora bien la música es dionisíaca, armoniza con los gritos de Dolor de desesperación y de rebelión –basta escuchar Beethoven, Bach, Wagner-. Expresa el deseo de poner fin a las represiones sociales y los tabúes sexuales, de modo de ser capaz de dominar las energías destructivas que van al precipicio del vació, de la nada.
La Tragedia ayuda a ver el Vacío de la Condición Humana.Si el vacío es, Dios es el que reina, porque aun cuando no existiera Dios, la religión continuaría siendo. Dios es el único ser que, para reinar no tiene necesidad de existir: nada existe sin fin, esto es sin un final y sin una finalidad.
Nietzsche cree que el individuo es un ser sensible al dolor y este es consecuencia de la radical insatisfacción de sus deseos: por lo tanto lo natural es la destrucción, el mal, el bien por el contrario, es siempre producto de un arte es artificial no natural así de este modo quien es superior es el que devela la realidad de lo aparente es el que muestra no el profesional ( como ser del conocimiento práctico) sino el profeta (como ser pensador y revelador de la condición del Ser)
En tiempos de una sociedad apolínea, de estúpidas elecciones que nos tienen envueltos en la dictadura de la democracia, algo para ser en la muerte y en la reflexión esperpenta. Esperando al superhombre.