Cuantos años ya llevan ahí?
Siempre en la misma cuadra, no te cansas de estar siempre en el mismo lugar?
De ver salir y entrar las mismas personas por años,
Para que un buen día toque tu fiel campana y nunca mas vuelvan?

Que lástima siento cuando al caminar siempre por la misma calle,
A lo lejos la punta de tu arcaica iglesia se asoma,
Y tu amenazante reloj me obliga a apurar mis pasos...

Por días me baja un odio enorme hacia ti,
Saber que pierdo mi libertad,
Encerrada en las cuatro mismas paredes,
En una cárcel de muros mas viejos que el mismo odio que siento ahora al verme en esta lata de sardinas.

Todos sentados,
No sabemos que es el exterior,
Pues en tus carceleras paredes se pierde noción del tiempo y lugar,
Nada existe.

Que bella fobia se apodera de mi,
cuando cuento días y años para abandonarte,
y poder ser libre¡¡¡.

El bendito toque de la campana acelera mi corazón de alegría,
Saber que puedo salir de mi celda,
Dejar de alcanzar las palabras que mi dulce carcelero tira por los aires.

Suena la campana, y llega mi libertad condicional¡¡
Que tiene mas de condicional que de libertad....