La mujer se derramaba
lentamente
fatalmente
hacia el abismo
del silencio
su pequeño cuerpo
se derretía
y ella
con los ojos cerrados
se masticaba la lengua
mientras
la música giraba
y las manos danzaban
desde abajo hacia arriba
desde arriba hacia abajo
ella
se ahogaba
de preguntas
sin respuestas.
La mujer
naufragaba eternamente
sobre un mar
que la arrastraba
al precipicio
del no ser
del no estar.
La mujer sonreía
ante su destino
de hoja
a la deriva...
Texto agregado el 05-12-2004, y leído por 208
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Lectores Opinan
09-12-2004
Es intenso y genial, es necesario que... la mujer se deje llevar por sus sentimientos y olvide su pesada carga.... Hermoso Mandragoras