Hace algún tiempo, no mucho para ser precisos, creí haber encontrado un amor, por fin un amor! seguramente todo va a empezar a mejorar!, así me sentía, él era amble, distinto y muy distraído, a veces creía que su alma se desprendía de él para ir en busca de las cosas que me enseñaba, me decía cosas muy especiales, creía que era algo así como mi guardián que me estaría cuidando a pesar de su alejamiento temporal del mundo racional.
No se porque pero cada vez quería que dieran las 11 de la noche para verlo, sentir su leve aire friolento en mi cuello, ver su pálida piel, sus ojos dilatados su boca roja, es que gustaba de comer paletas sabor cereza!, siempre quería probarla de su boca, en fin a esa hora todo empezaba como siempre con un “hola” y la charla se extendía hasta horas no adecuadas, la verdad es que no nos gustaba dormir éramos como criaturas de la noche huyendo del sol, solo gustábamos de la luz de las velas, íbamos, a veces, al parque cercano a casa allí veíamos la luna que temerosa a veces se escondía tras las nubes color gris, el ambiente era tranquilo, todo callado, apenas escuchábamos el aire filtrarse en los árboles secos y rotos, el murmullo del pasto que cantaba al insecto más extraño y bello, nosotros nos sentábamos en una banca, sin duda era nuestra escribimos nuestros nombres juntos alrededor de una estrella mal dibujada…ah recuerdo cuanto nos gustaban las estrellas que para nosotros eran rojas en el cielo negro.

Así pasamos muchas noches en las sombras en los rincones de las calles solitarias, todo era perfecto para mí no quería más de la vida; pero recuerdo todo cambió. Era un viernes muy frío de hecho el más frío que recuerdo podía ver a los árboles temblar y el viento reír, él venía como todas las noches a casa yo ya lo esperaba muy ansiosa, él entro con el rostro más escalofriante que haya visto su mirada estaba más perdida que de costumbre, yo temblé y me acerque con cautela hacia él, vi. que me miraba asustado con ese rostro tan demacrado…no entendía porqué estaba así, de pronto escuché que me dijo” ya no tengo miedo” hay! esa voz tan ronca que salió desde su estómago me estremeció, yo le pregunté “que ocurre¿?”, lo tomé de los hombro y lo sacudí para ver si reaccionaba pero de un pequeño salto reaccionó y me dijo “lo siento, ya no te puedo ver más” y salió directo a la calle a una que estaba muy sola y obscura, yo por más que quise no pude moverme pues apenas vi a lo lejos que de su mano escurría sangre y que dejaba un rastro pequeñas gotitas color escarlata”pero que demonios hizo!!¿?” Después reaccioné y corrí en su búsqueda pero mientras corría él a paso lento pareciese que corría también jamás lo alcancé y se perdió en las sombras.

Recuerdo Que no entendía porqué paso eso, me dolía la cabeza, mis ojos estaban hinchados, mis manos también todas de dolor, de pena y angustia, ya deseaba que fuese de día, y que, aunque no me gustaba salir a exponerme al sol, por saber de él lo haría. Me dirigí a si casa, había mucha gente todos de negro afuera esperaban carros la gente lloraba, yo entre y vi a su madre que estaba muy desconsolada me acerqué con discreción y ella me dijo “yo no pude evitarlo….estaba muy solo….” y hecho a llorar. Que tonta de mí pues apenas entendí que…Estaba en su velorio!!! el velorio de mi amigo, el único que tenía en todo este mundo!!!...pero….yo lo ví ayer ..bueno no se veía muy bien pero lo ví…..las manchas!! la sangre de su mano!!!! se mató!!!! fui a con su padre pues su madre no estaba en condiciones muy apropiadas de hablar; su padre me contó todo:”Salió a las 9 de la noche dijo que no se tardaba y que cuando regresara todo cambiaría, y vaya que cambió…..la policía lo encontró en un parque cerca de tu casa estaba desangrado ya había muerto…” después me dijo” ahora odio las 12 de la noche..Maldita hora!!” entendía que a esa hora murió.

El amor…sí…tal vez lo encontré...No hubieron besos ni sexo...Pero si mucha compañía y protección.Que otra cosa es el amor¿? Pero lástima que se tuvo que ir.
Aún en las noches siento que viene a la misma hora puntual siempre a las 11 de la noche, se que es él pues siento ese frío tan reconfortable que sólo él me puede dar, y también me pregunto porqué hizo eso…nunca lo sabré hasta que lo vuelva a ver…algún día …