Distancia inteligente que alejas del presente lo que creía un futuro, vana ilusión en mi mente. Separas a los cuerpos unes a nuestras almas mientras te robas la calma entre los segundos muertos. El amor no es un obstáculo para tu eterna tarea alejar la gran marea para vestirnos de luto. Incesante tu carácter dominas con tu presencia y me ganas con la ausencia de una mirada constante. Me rindo ante ésta lucha que sé no podré ganar porque no logaré sanar a un alma que no me escucha... Hay fuerzas más allá de la nuestra...
Texto agregado el 03-12-2004, y leído por 217 visitantes. (1 voto)