Sui cáedere

Nuestras defensas han cedido. Casi todo ha muerto ya; humanos, robots, animales, la vida vegetal... los insectos aún viven, huyen en hordas concéntricas que obscurecen el sol, son pocos los que vuelan solos, la mayor parte busca la protección que ofrece el éxodo en conjunto. Morirán muchos, pero estoy seguro que algunos llegarán a algún otro asteroide habitable, más allá de la crueldad del enemigo.

El cielo se torna cada vez más rojizo, el aire debe ser irrespirable. Mi tanque de oxígeno puede aguantar una hora más, pero tal vez el horror o un ataque corrosivo acabe conmigo primero. El oxígeno no es ningún problema para Naomi, lo que ella necesita son chips nuevos, un cañón láser le destrozo parte de la espalda alterándole los circuitos.

- E mae kardo ... atrhom .... atrohm.

Palabras huecas, sin sentido, nada más se escucha de Naomi. Un cerebro digital desordenado, es una joya inservible. Chips expuestos a modo de vísceras sintéticas, vértebras de acero... ruinas de una espalda perfecta, piel sintética derretida en la región lumbar, ojos en blanco ... indescifrables ... compuertas que encierran la nada. Traje negro... adherido al relieve del cuerpo abiótico perfecto, con metal incrustado que me refleja.

- Aro... nea... ortro.

Labios negros que describen la agonía con palabras ininteligibles... ella susurra oscuros poemas, nadie entiende ... ni ella misma ... ella dice las palabras, la materia prima, para que algún poeta les de sentido, las procese y les quite el vacío ... ella es la musa indescifrable.

-Arggggraaaaam.

Un líquido radiante emana de su boca, Hekrelio, lubricante para robots. Afuera todo es caos, enormes estructuras de acero aplastan los cuerpos de seres desgraciados, ácido humeante escurre entre los huecos, y los cielos se estremecen con estruendos intermitentes, el asteroide entero es una tumba sin epitafio.

-Gotkio ... Gotkio.

Ha dicho mi nombre... quizá sus circuitos se estén auto reparando, de todos modos no sobrevivirá por sí misma, necesita una reparación urgente. Silencio... todo es silencio ahora, el ataque ha cesado. Una sombra gigantesca oscurece la ciudad. Naomi agonizante y yo Gotkio escondidos entre las ruinas, entre los muertos a salvo de la ponzoña humana y a merced de la crueldad alienígena.

Un zumbido hace vibrar las ruinas, viene del cielo, es emitido por el titán que oscurece la ciudad... Se detiene el zumbido, ahora escucho movimiento de compuertas, zumbido otra vez ... cada vez más cerca ... lluvia de hierro ... explosión azul en el horizonte ... lluvia de insectos.

-Hmmm...

Naomi se retuerce, parece sensible a la estridencia.
Zumbido otra vez... el titán se retira de la ciudad... penumbra total... después silencio. Fin del ataque, comienzo de una nueva conquista.

-Sui cáedere... sui cáedere.

Naomi mejora, habla en lengua muerta ...

-Sui cáedere... sui cáedere.

Insiste...

-Sui cáedere... sui cáedere.

La perra tiene razón... Inyección de ácido corrosivo en las venas ... primero ella ... ahora yo...