Cierta noche se encontraron las estrellas, el sol y la luna, quienes estaban aburridas puesto que no sabían qué hacer, para matar el tiempo y la soledad.

En un momento cualquiera en medio de un estruendoso silencio la luna dijo: --juguemos al eclipse, el sol lo pensó unos segundo mientras miraba un cometa pasar cerca de Andrómeda y seguido a esto respondió:-- me parece una buena idea un poco complicada pero al final de cuentas una buena idea.

Cuando iniciaron el juego, una estrella polar quien sin ser invitada, también se unió a la fiesta y dijo:
--llamemos a la tierra para que también juegue.

pero a la luna no le gusto ni poco esta idea. razón por la que se puso blanca de la rabia, pareciendo una luna llena, y fue por esta razón que grito con mucha fuerza de un solo tajo no....,

Todos se quedaron callados, nadie quiso hacer frente a las pataletas de doña luna, ellos sabían, que La luna, tenia envidia de la tierra.

según la luna, la tierra tiene muchos amigos que la protegen y ella no.


Pero lastimosamente lo que no sabía la redondita y blanquita, es que la tierra también siempre ha tenido muchos enemigos que la matan muy lentamente.

Cuando estaban en el mejor momento del juego la tierra los vio y se puso triste, pero la tierra se quedo completamente callada, clavando sus ojos en un par de nebulosas.


De la tierra brotaron lagrimas provenientes de los mares del sur de la patagonia chilena y argentina como también de los mares, de Australia.


Las risas de la luna, el sol, de mas planetas y otras estrellas, eran tan fuertes que la tierra no soporto tanta pena, por ver como sus amigos le daban la espalda, la tristeza fue tan grande, que del hermoso pecho azul con rayitas blancas perteneciente a la tierra nació, una fea mancha muy negra que nadie entendió.


los astros sintieron tanto miedo de ver la tierra así, que cada una de ellos corrió hacia lugares diferentes, ya muy lejos de ese lugar el sol pensó y se dijo así mismo: --todo por la culpa de un juego inventado por la luna llamado eclipse de luna.


Desde ese día el sol prometió mas nunca estar cerca de ningún otro planeta además obligo a la luna, que siempre acompañara a la tierra en sus recorridos, además dijo a todas las estrellas que alumbraran su camino para que así mas nunca la tierra sintiera soledad.

El sol, y la luna en algunas ocasiones se alinean haciendo manchas negras en la tierra, pero ya la tierra no se pone triste, porque esos eclipses son el pacto de una hermandad que existirá por siempre.

Los 3 astros escogieron un momento desagradable, para tornarlo algo glorioso...