Distancia que parece imposible
altura tan alta
que se pierde en la espesura
de ese brillo celeste
y me atrae una figura
que me grita desde aquel día,
insistiendo cada momento,
empujando a decidir sin demora
a jugarme lo que hay por delante,
que me tilden de loco
pero yo voy a Marte.
Texto agregado el 01-12-2004, y leído por 108
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