¡Qué incongruencia!
Que yo me encuentre
y en el trayecto te pierda.
Tendamos un puente
para cruzar los caminos,
las sendas y las veredas.
Un puente ancho
en que quepan holgadas
todas las ideas nuevas.
Un puente alto
para que al asomarnos,
el pasado
con sus látigos y cuerdas,
no nos alcance, no nos venza.
Para que el sol y la luna
cercanos,
a un tiro de piedra,
del desamor nos protejan.
Texto agregado el 28-06-2003, y leído por 242
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