Firmemente y con perfil bajo vuelves a entrar a mi humilde posada, cansada de ver sombras de inmadurez de tus viejos amores...
Pasaron meses y recaes en mi más veces que un pecador en dios, y solo pides más, solo un poco más de mi frágil e incierto corazón..
Sos la ada de mi sinceridad y a la vez el temible ser que se sofoca en mi interior al volver contigo, me has lastimado y como un simple necio no puedo soltar tu mano para que te ahogues en tus propios llantos de perdón.
Lo que vivimos juntos queda en el recuerdo que de apoco nos va siguiendo pensando solo en que tomemos el sinuoso camino de amar y no pensar en quien hoy a mi lado está.
Soy indeciso, mi armadura se va quebrantando por el inmenso amor que la destruye sin evitar lo que me pasa, sin embargo el tiempo pasa y me acostumbró a decirte no miles de veces, a decir no a un amor que da mas dolor que la felicidad que jamás se podrá encontrar.
Muchos de tus amores son rencorosos y te castigan hasta no dar mas, eres débil y por eso sé que soy el elegido para amarte sin pensar, lastima que para mí ya no estas..
Pasaron varios meses mas, sigo sin tentarme en volver a tus brazos y sentarme junto a vos a descansar, tus suplicas siguen, tus heridas no cesan, pero yo de apoco cierro mis persianas a ese amor que lástima y solo siente en que algun dia la voy a perdonar..