Sólo papel, blanco, rayado y aburrido papel en el cual traté de plasmar mil y un ideas, en el cual traté de expresar sentimientos que al llegar, con sólo medio soplo, pudieron borrarse del sol del día.
Al hablar no me escucharon, al reír me hicieron llorar y saber que lo que espero no siempre pasa. Creé yo sola un nudo en una garganta ajena, que al fin de cuentas terminó siendo mía, si, mi garganta.
Imaginé momentos que al llegar no parecían de verdad, pero me ayudaron a aprender que todo lo que brilla no es oro y que las apariencias, después de todo, no engañan tanto como lo pensé.
Traté de vivir en un mundo negro, que poco a poco se volvió azul, de azul pasó a verde, de verde a amarillo y de amarillo a tonos derivados que obligatoriamente aclararon mi vida cuando sólo quise vivir en oscuridad.
Intentos fallidos por ser algo que no soy, y lágrimas corriendo por manos que una vez fueron mías, pero que por arte de magia corté. Las corté con una tijera llamada SOLEDAD, mi tijera favorita, la que estuvo siempre conmigo y jamás me va a dejar. Palabras dichas por una boca que se fue con el viento, una boca que lloró al notar que al crecer la gente cambia, y todavia sigo en mi mundo aparte, que fue una vez, es hoy, y será igual hasta el dia que mi reloj marque cero..de nuevo.