...Y contemplando su obra maravillosa supo Dios, que era el momento de crear al hombre, pero viendo que no le quedaba material suficiente decidiò hacerlo con partes de su creación.

Le hizo las piernas, pero como ya no le quedaban más piernas tomó dos troncos y los puso en su lugar, es por esto que todos los hombres aunque pasemos caminando y creando nuevos caminos toda la vida, siempre estaremos buscando como los troncos echar raíces.

Y luego Dios hizo el dorso y el pecho con un nido de hojarasca fresa y dentro de ella colocó una vasija de barro llena de espíritu y en su interior la semilla de los sueños, por esto tenemos que regar nuestra hojarasca con esperanza y alegrìa cada dìa porque sino se nos seca el alma y se nos marchitan los sueños.

Después decidió hacer los brazos con plumas de aves recien caídas, esto explica porque los hombres aún soñamos con elevar vuelo y tocar el cielo.

Para finalizar su obra le puso por cabeza un nido con dos águilas: una de ellas tomó aire y voló, la otra se quedó esperandola y se convirtió en los labios. Creo firmemente en esta historia , pues cuando veo los labios de mi amada no puedo reprimir la dulce libertad de los míos que vuelan a su encuentro para amarse como fué en un comienzo.