Todo comienza en el año 1998, cuando estaba en primaria que empezaba a darme cuenta de la existencia de la vida y consigo llevaba el amor, la envidia, la tristeza, la alegría… Entre otros factores que se unen y le dan la razón de ser de cada vida a todo ser humano. Bueno!, todo empieza cuando estaba en 6º grado, era una personita sola, extrovertida y a la vez tímida, no tenía amigas ni amigos, solo eran compañeros de clases que se me acercaban a preguntar algo o solo a decirme simplemente HOLA!. Llegó un día en que conocí un grupo de muchachas que parecían tener la misma forma de ser que yo y pues eso me llamo mucho la atención, empezamos a tratarnos a caminar por el pasillo del colegio y a contarnos cosas personales para poder tener confianza en el grupo ¿entienden?. Estas eran 3 muchachas que con el tiempo y a muy corta edad me di cuenta que no eran las personas indicadas para ofrecerle por completo mi amistad y por lo tanto me aleje de aquellas personas que creía haber encontrado una amistad. Al momento de separarme y decirle lo que sentía en ese momento no lo podían creer, lo tomaron como algo desagradable y grotesco, desde allí comenzó la envidia de ese grupo de muchachas. ¿Se pueden imaginar lo que es luchar o sufrir por los ataques de “3 niñas” que no entienden lo que pasa?, pues sí, es algo frustrante con lo que te debes armar de valor y paciencia, y no meterte mas en sus vidas.
Después de todos estos conflictos se me acercó una de ellas de forma discreta y por lo tanto al enterarse “las otras”, las discreta se enfrentaba al igual que yo con sus amigas, al principió creí que se me acercaba por interés o por venganza, ya que para aquel tiempo yo coleccionaba uno de los muñecos de Sanrio, Uno de los amigos de los amigos de Hello Kitty e impresionantemente ella también. Por esa razón fue que empezó todo, empezamos a hablarnos y compartir cosas, teníamos casi todo en común y pues a mi me parecía algo extraño, nunca me había pasado algo parecido y desde ese entonces comenzó mi amistad con aquella persona que llegue a tener un problema y que hasta me llegó a envidiar … Después de tantos percances creí haber encontrado la amistad, ya que venía a mi casa, se quedaba como por 1 mes y entre otras muchas cosas mas yo ya conocía toda su vida y ella la mía.
Cuando ya se acercaba la salida de la secundaria, notaba que ya estaba distanciada de mi y no era lo mismo, sus amigas nuevas me tenían rabia por el simple hecho de que se la pasaba conmigo, y no con ellas, llegó hasta tal punto que ella también empezó a pensar de mi lo mismo que sus nuevas amigas; ahí empecé a darme cuenta que después de tantos años de conocernos “La amistad no existía entre ella y yo” por que si hubiese sido así no le habría pasado por su cabeza ningún pensamiento malo de mí!. Sólo me entere, que ella me tenía cierta envidia después de todo y que ahora se juntaba con las amigas nuevas de su curso a hablar mal de mí. Me dolió más que cualquier otra cosa y desde ese entonces empecé a no tratarla e ignorarla y así olvidar la mala experiencia de tener “Una amistad”. Dos años después ella llamó Disculpándose conmigo, yo lo hice porque en realidad no me gusta quedarme con cierto rencor y aquel odio que llegue a sentir…, pero ya no era igual, ya ella para mí, era otra persona más en el mundo que al igual que yo le faltaba por vivir y pensar bien lo que realmente perdió por inmadurez e ignorancia al no saber lo importante que es para cualquier persona tener a su lado a alguien con quien contar en las buenas y en las malas.
Pero eso ella no lo entendió y realmente no se si esas disculpas fueron sinceras, pero ahora simplemente lo recuerdo como una experiencia más en mi vida y me pregunto…, ¿?¿? por que todavía después de tanto tiempo no he tenido la dicha de tener a alguien a mi lado que represente el significado de la amistad?, no se si por lo sucedido me impido a mi misma conocer a alguien porque por lo visto no solo esa persona debe ser igual o parecida a ti, tampoco tiene que tener los mismos gustos, pero no se si a la hora de escoger me volví como mas exigente; tampoco es fácil volver a confiar así por así.
|