Es viernes por la noche en la prisión de la policía de tránsito y mis cuatro amigos de toda la vida y yo estamos encerrados por haber sido parte de un accidente donde salieron heridos una pareja de enamorados.
Esta oscuro acá adentro, no nos han dado ni agua ni café para poder pasar esta noche tan calurosa, este lugar se hace cada vez más nauseabundo, las paredes están llenas de nombres y los colchones de las camas están totalmente rotos y hay roedores por todas partes.

Tengo exactamente media hora de estar acá y de haber solicitado una hoja de papel para escribirle a mi madre, pues se suponía que debería de estar temprano en la casa y debe estar preocupada. Además de eso a Eric, uno de mis amigos, le acaba de dar un ataque y nadie lo atiende, el pobre pasó cinco minutos en el suelo hasta que se le pasó. Luego de una hora de espera llega por fin mi papel, pero solo me dan cinco minutos para escribir y que el policía de turno cerca de mi casa se la lleve a mi mamá por la mañana.

Querida Madre:
Te escribo esta carta para que no te preocupes por mi, yo tenía que estar en la casa a las 9 de la noche lo se, pero lamentablemente al salir de la fiesta chocamos con un auto y nos tienen en la cárcel hasta que todo se resuelva, espero que esta carta este en tus manos al amanecer para que no sigas preocupándote mas.
Te las detallaré mejor por que se que quedarás con muchas dudas y es mejor que estés sabida por mi puño y letra de lo que sucedió para que nadie mas te invente algo. Estuve toda la fiesta tranquilo, bebí lo normal, unas cuantas cervezas, baile y me divertí mucho, ya era la hora de regresar a casa como te lo prometí y así poder estudiar para mi parcial del día siguiente; pero creo que el destino no estaba a mi favor esta noche Eric era el que de todos nosotros estaba menos tomado, así que decidimos que condujera él por si la policía nos paraba, lo que ninguno de nosotros sabía era que Eric había estado consumiendo droga mientras nosotros bailábamos y conversábamos, entonces el estaba un poco atontado, al llegar cerca de un alto casi no se detuvo fue entonces cuando sospechamos que el estaba drogado y era peligroso por que otras veces ya lo habían detenido por eso, le dijimos que yo conduciría pero no quiso, insistió que estaba muy bien.
Estábamos muy cerca de la casa faltaban quizás como dos cuadras cuando un carro pequeño paso frente a nosotros, no lo vimos, Eric no llevaba luces y el auto era oscuro, fue un gran impacto quedamos medio tontos después del golpe, pero no podíamos quedarnos ahí por que verían que habíamos tomado y esa no era la razón del accidente si no la imprudencia de esa gente. Llego la policía nos interrogaron, no podíamos decir que Eric manejaba si lo examinaban estaría en la cárcel mas tiempo, no sabíamos quien seria el que se echaría la culpa y como no decíamos anda nos llevaron a todos pero sin hacernos exámenes y hasta que alguien diga algo, nos sacaran, espero que mañana tengamos resuelto esto.
Lo siento mamá, no volverá a pasar lo prometo desde ahora seré yo quien conduzca al salir por las noches, creo que deberé alejarme un tiempo de ellos para que este acontecimiento nos haga reflexionar y no vuelva a suceder. Espero verte pronto, es solo un mal entendido que resolveremos pronto.
Con mucho cariño, tu hijo
Antonio


Es sábado por la mañana y aun no nos decidimos bien quien será el que se inculpe, la mayoría esta de acuerdo en que sea yo por que nunca he estado en la cárcel y no tengo ningún antecedente, así que tengo las de perder, por supuesto que a mi madre no le gustara la idea para nada, pero creo que será necesario para que mis amigos no los dejen un mes acá adentro de este lugar tan desagradable.
Hace dos meses del accidente, lamentablemente fui el que pagó los platos rotos de esa ocasión, pero desde esa vez Eric esta en tratamiento y no ha tenido mas problemas con las autoridades, ninguno de los del grupo también. Desde ese día mi madre esta mas cuidadosa con lo que hago y digo por que no quiere verme en la cárcel de nuevo, me tuvieron una semana y ella iba a visitarme cada uno de esos días, no me gustaba que me viera así por que sufría y por que simplemente no era mi culpa ella lo sabía y me lo reprochaba con la mirada. Ahora que lo pienso bien se ha comportado mucho mejor de lo que esperaba, pero la verdad no debió pasar esto en ningún momento, para la próxima no habrá próxima, como decía mi abuela.

Es viernes de nuevo y hemos decidido salir con mis amigos a celebrar el cumpleaños de Eric y su rehabilitación, eran dos fiestas en una, así que decidimos ir a un bar a tomar algo y conversar de nuestras vidas que desde hace dos meses no eran las mismas. Juan inició un brindis por nuestra amistad donde todos levantamos nuestras cervezas y fue lo único que recuerdo, luego estábamos otra vez en la cárcel, Eric era el único de los cinco que estaba fuera de las rejas, según dice, el se retiró cuando vio que estábamos poniéndonos ebrios para no tener problemas con las autoridades. Ahora era el quien nos ayudaba, pero tenia razón, no debíamos haber tomado tanto esa noche, pero ya estaba hecho, una noche mas en la cárcel y otra carta mas para mi madre.

Querida Madre:
Te escribo de nuevo desde la situación vergonzosa en la que me encuentro y en la cual prometí no volver a estar, perdóname mucho pero la verdad no creí llegar a esto, solo estábamos celebrando y no se por que ni como llegamos hasta acá, Eric nos explicó la situación por que el no bebió mucho, mas bien se retiro cuando vio que estábamos ebrios, no lo entiendo bien, debió habernos detenido pero no lo hizo.
Es segunda vez que me pasa esto, por no controlarme en mis impulsos, pero esta vez fue peor por que si tuve la culpa, no quiero que sufras por lo que hago, por que no es intencional, quiero que sepas que me arrepiento de todo corazón y que cuando recibas esta carta no creas que es necesario venir a verme, estaré bien no te preocupes en un tiempo salgo y estaré de nuevo en casa.
Todo empezó con un simple brindis, nadie se imagino que algo tan inocente terminara mal, según Eric, después de ese brindis empezamos a tomar cada vez mas por nuestros problemas, por nuestras decepciones, por que ya casi no nos veíamos, por aquella vez que fuimos a la cárcel y tuvieron que dejarme ahí, así hasta se nos acerco el mesero y nos dijo que no podíamos seguir tomando más, yo lo golpeé en la cara y ese fue el inicio de una pelea, llamaron a la policía y no fue hasta una hora después que se aparecieron por ahí donde todavía seguíamos tomando hasta quedar dormidos, así fue como nos llevaron a la cárcel y es por eso que no recuerdo nada.
Dicen que en unos días saldré libre por que fui yo quien inicio la pelea, pero tranquilízate no te alteres, hoy no fui yo quien se echo la culpa por los demás, fue por una declaración del cantinero que me toco estar mas tiempo acá. Te vuelvo a pedir que no vengas, es doloroso para ti ver a tu hijo en estas circunstancias y además de eso no estas en condiciones de salir de la casa con ese resfriado, es mejor que te cuides y abrigues bien para que puedas mejorar.
Lo siento mamá, no volverá a pasar lo prometo desde ahora seré mas cuidadoso a la hora de tomar, no dejare que las emociones me dominen así para descontrolarme, también pues creo que deberé alejarme de nuevo un tiempo de mis amigos para que dejemos a un lado las cosas tontas que el alcohol nos hace cometer y que esto no vuelva suceder. Espero verte pronto, perdóname y no te enojes conmigo por favor, la verdad bien sabes que no he sido una persona violenta.
Con mucho cariño, tu hijo
Antonio


Es lunes por la mañana, hasta ahora veo de nuevo la luz del día y a mi querida madrecita que sigue sufriendo por culpa de mis descontroles, de mis salidas alocadas con mis amigos, que desde hace dos meses no nos traen nada bueno, ya lo tengo comprobado pero no quiero aceptarlo somos amigos desde pequeños y no creo que en una situación difícil sea el mejor momento para alejarnos sino mas bien para apoyarnos mas. Mi madre fue a recogerme a la cárcel, estaba mejor de su gripe, pero en su corazón tenia una carga que definitivamente se debía a lo que me había pasado, le había prometido que esto no volvería a pasar y en teoría era cierto, pero ella no me entendía, no conversaba conmigo de esto prefería meditarlo y callar. Me dolía que no conversáramos de esto, en especial por que sabía que en lo más profundo de ella, quería hacerlo; pero creía que yo no iba a contarle nada mas de lo que decía mi carta de esta vez.

Paso el tiempo y Juan se fue del país, le hicimos una despedida no hubo ningún problema, fue en mi casa así que no tenia que salir y darle otro dolor de cabeza a mi madre, celebramos tranquilos, bebimos algo y luego de eso quedamos profundamente dormidos en los sillones de la sala. Al día siguiente todo normal, cada quien se fue a su trabajo, Eric acompaño a Juan al aeropuerto y los demás salieron de la casa temprano para arreglarse en sus casas. Regrese temprano ese día y encontré un mensaje en la contestadota era de Mateo mi otro amigo, decía que necesitaba de mi ayuda, parece que Eric volvió a caer con una sobredosis y no puede llevarlo al hospital solo. Al llegar a la casa de Eric, observé la puerta abierta tal parece que Mateo se había ido y lo dejo así solo, no lo podía creer por que haría eso, pero al entrar y ver a Eric tendido en el suelo por la sobredosis me di cuenta que Mateo también había estado drogándose y temía que le hecharan la culpa, supuse que por eso me llamó; levanté a Eric y lo puse en un sofá, llame a la policía y esperé, pero no se me ocurrió en ningún momento limpiar la evidencia. Al llegar la policía y ver todo en la mesa y a Eric tendido en un sofá, no preguntaron nada y me llevaron al auto con las esposas en las muñecas y a Eric en una ambulancia.

De nuevo me encuentro en la cárcel, pero esta vez sin tener nada que ver en lo que sucedió, Mateo había ido a visitar a Eric y lo encontró drogándose, en lugar de detenerlo se le unió y después de un tiempo el cuerpo de Eric no resistió y se desplomó, Mateo desesperado llamo a todos sus amigos pero solo yo acudí a su llamado, el huyó del lugar y ahora me toca afrontar las consecuencias de lo que decidan las leyes.

Querida Madre:
Ya no se como esconder mi cara para que no la veas, me da vergüenza, no soporto la idea de hacerte llorar por una de mis tonteras, pero esta vez yo no tuve nada que ver, solo acudí a un llamado de Mateo que estaba en casa de Eric y decía que había tenido una sobredosis y no sabía que hacer por eso me pido que fuera donde el.
Al llegar la situación fue otra, Mateo había huido por que sabia que yo llegaría, el estaba drogado también y estaba seguro que si lo veían ahí lo culparían de lo que sucedió, cuando el solamente iba a visitar a Eric. La policía confundió lo que vio con lo que paso y es así como acabe acá.
Dicen que si no encuentran cargos en mí pues me dejaran libre, así que creo que saldré pronto, por que ya me hicieron los análisis de sangre y esas cosas para ver si estaba drogado y bueno salieron negativos obviamente. Pero dicen que hay una probabilidad que yo la distribuyera, así que no se la verdad cuando me dejaran de interrogar.
Mamá te pido que tú te quedes en casa y no intentes nada, soy inocente de todo así que estas personas no me van a poder culpar de nada, además de eso Eric ya esta bien el podrá atestiguar que no estuve ahí y me dejaran libre, lo que no se es que pasara con ellos dos, pero quiero creer que les ira bien, yo atestiguaría a su favor si es necesario pero no se si me dejaran por estar ahora de sospechoso.
Lo siento mamá, no volverá a pasar, lo prometo, creeme, desde ahora seré mas cuidadoso cuando quieran mi ayuda, no voy a permitir que jueguen conmigo de esa forma solo por el hecho que ellos saben que siempre les ayudo cuando me necesitan, es otra ocasión para rectificar y de nuevo ser una persona independiente y que esto no vuelva suceder.
Espero verte pronto, no creo que pase mas de una semana acá dentro, pero esta vez te juro que será la última semana de mi vida que pase en la cárcel.
Te quiere mucho
Antonio


Paso un mes y mientras tanto yo seguía en la cárcel, mi madre no fue a verme ni una vez, por que se lo prohibí, me parecía demasiado doloroso para ella que me viera en esas condiciones y aun más si sabía que era inocente. Lastimosamente Eric murió, después de esa vez de la sobredosis quedó muy enfermo, Mateo se sintió tan culpable que fue a confesar lo sucedido con la policía, entonces fue que me dejaron libre y a Mateo lo metieron a la cárcel por haber estado ahí aunque salió dos meses después.

Sin Juan y Eric nuestro grupo se había reducido a tres personas, ya no era tan grupo, era el trío de los sobrevivientes, salíamos de vez en cuando, nos reuníamos por lo menos una vez al mes. Mateo después de un tiempo se sintió muy culpable por lo sucedido dejo de salir con nosotros y poco a poco se retiró del trío. Pasados dos años no sabíamos nada de el, se perdió de nuestro alcance, hasta que después de un tiempo recibimos una noticia muy trágica que sorprendió a todos, Mateo se había suicidado después de dos años de cargar con un peso que según el era suyo, Mateo creía que el había matado a Eric -sino hubiera sido por mi- decía la carta de suicidio – Eric seguiría vivo-. Nadie se esperó eso de él, Mateo era una persona muy fuerte el nos aconsejaba a todos y creo que es de ahí de donde provino su culpa, no aconsejo a Eric en lugar de eso hizo lo mismo que el y este murió. Para el funeral de Mateo regreso Juan, quien no se explicaba todo lo sucedido durante su ausencia, estaba tan triste por que dos de sus mejores amigos habían muerto en su ausencia, se sentía mal por eso, es por ello que Guillermo y yo no nos apartamos de el ni un momento por que temíamos que cometiera la misma locura que hizo Mateo. Después del funeral salimos a tomar un café y a conversar como en los viejos tiempos, Juan quiso ir un rato a un bar que frecuentábamos cuando éramos más jóvenes los cinco, conversamos, hasta que no se como, empezamos a beber; pero yo había prometido a mi madre controlarme, les dije a mis amigos que no podía tomar mucho por lo sucedido la otra vez que me descontrole por borracho, Juan me dijo que no me preocupara que el tenía la solución – en Europa hay unas pastillas que te las tomas con café y sin necesidad de alcohol, puedes sentir los mismos efectos y no te vuelves violento- yo lo mire y sonreí con una cara de ¡no gracias!, pero el insistió, se metió la mano en el bolsillo de la camisa y saco tres solo para mi, al ver que no retrocedería acepté y tome una a una con mi café.

Eran las tres de la mañana del día siguiente no se como, pero estaba solo, mis amigos se habían ido, se les olvidó que fui con ellos de lo borrachos que estaban, pero al ver bien estaban en mi auto, dormidos y yo ahí en el bar dormido, al levantar la cabeza observé que se acercaba el dueño del bar con un grupo de policías; me señaló y dijo –el fue él que consumió esas pastillas y después de un tiempo como sus amigos no le daban mas el los quería golpear, los apartamos de él y en ese momento se desmayó, desde ese momento quedó en esa mesa hasta ahora que despierta-.

Querida Madre:
Perdóname nuevamente, esta vez lo confieso fue todo mi culpa, no debí haber consumido esas pastillas, pero es que a verdad no lo pensé estaba con mis amigos no podía pasarme algo malo, estaba triste dos amigos muertos y bueno me descontrole algo. Al tomarlas sentí como mi cuerpo se relajaba lentamente pero después de un tiempo de tenerlas en mi cuerpo paso lo contrario me descontrole, quería más, según el cantinero Juan me aseguraba que tres era la dosis máxima sino podría intoxicarme, pero no hice caso y le quite dos mas, después de eso golpee a Guillermo sin razón y lo obligué a que tomara una pastilla estando el ebrio, eso hizo que se pusiera violento y nos peleamos entre los tres, hasta quedar desmayados.
El cantinero afirma que yo traía esas pastillas y que fui el único causante de todo, la policía no hizo preguntas y me llevó directo a la cárcel de nuevo, no lo entiendo por que nunca preguntan nada antes de traerme, pero la verdad con la imagen que les creo el cantinero de mi hasta yo me vería como un drogadicto.
Acaban de avisarme que tendré que quedarme una semana mas mientras el juicio se lleva a cabo, no se si estaré mas tiempo, la verdad me gustaría verte madre pero no se si te hará bien a ti, por que es un lugar mas feo de todos lo que me han traído antes, no se si soportaras verme detrás de un vidrio y solo por cinco minutos, esto ya es mas serio dicen que soy un traficante además de los cargos anteriores de ser un adicto, por que de esa droga no hay acá en el país solo en Europa. Tengo pruebas que no he ido ahí ni he recibido nada de ese lugar, así que creo que en el juicio quedo libre.
Estoy tan arrepentido, te he fallado lo siento mamá, esta es una de esas promesas que no creí romper, prometo que esta vez me alejare de todo tipo de droga y de las personas que las utilizan aun cuando eso implique alejarme de mis amigos, seré mas cuidadoso cuando me ofrezcan esas cosas, diré que no de inmediato y me alejare para que no me relacionen con cosas en las que no tuve nada que ver, prometo que no me veré involucrado en esto de nuevo y tu no tendrás que sufrir esta pena ni dolor otra vez.
Espero verte pronto, mientras tanto háblame, si puedes ven a verme, creo que pasara un buen tiempo acá conociendo la rapidez del sistema judicial de este país. Pero no temo nada por que no hice nada malo y esta vez madre te lo prometo con todo mi corazón será la última vez que me veras en este lugar tan despreciable y humillante.
Te extraño mucho
Antonio


Me pareció eterno ese tiempo que pase en la cárcel, exactamente transcurrieron seis meses, por que aunque no probaron que esa droga era mía, que yo había traído eso al bar y que había inducido a mis amigos a consumirla así como aseveraba el dueño del bar; me detuvieron por el consumo de esta y por tenerla en lugares públicos ya que era completamente ilegal en el país. No supieron nunca que la droga era de Juan y que Guillermo la había probado por que el quiso no por que lo obligué, nadie mas fue a la cárcel que el favorito de los policías, yo. No he visto a mis amigos desde esa vez y la verdad es mejor para mí, por que estos últimos años solo nos habíamos dado problemas los unos a los otros y el que mas afectado había salido era yo, siempre a la cárcel, primero una noche después una semana, le siguió un largo mes y bueno ahora seis meses era demasiado para mi, era como si pagara todo lo que ellos hacían y además de eso cada vez que iba a la cárcel mi madre enfermaba mas, se ponía triste y esa tristeza le daba muchos problemas con su corazón y bueno no quería ser una carga para ella en estos momentos, era mejor cuidarla y estar cerca de ella en este tiempo en lugar de alejarme por tonterías que hacia con mis amigos.

Mamá se mejoró mucho en este último año, su corazón esta bien, su vida no se ha visto alterada por ningún tipo de acontecimiento que me involucre con la cárcel, mis amigos están bien según se, ninguno de ellos a muerto. Guillermo trabaja como siempre en esa importadora de computadoras a veces lo veo cuando paso por ahí pero solo lo saludo para evitar cualquier situación que nos lleve al bar de los problemas; en cuanto a Juan se que regresó a Europa, se caso con una Española y están esperando un hijo, deseo que no tengan problemas nunca y que principalmente no tenga que verme envuelto en ellos de nuevo.

Después de no vernos en cinco años pensé que las cosas habían cambiado con Juan casado y con dos hijos y Guillermo estando por casarse en unas semanas decidimos juntarnos con Guillermo para hacerle una despedida de soltero, no tenía nada de malo, no creo que fuera a pasar nada en especial por que sería en su propia casa y Guillermo vivía con su hermano menor no podían pasar cosas así ahora ya habíamos cambiado.
Eran las doce de la noche y la fiesta terminó, las personas se marcharon, le ayudamos a Guillermo a limpiar, luego de eso vimos que Juan empezó a llorar sobre el sofá, nos acercamos con cuidado por que el es una persona muy bromista y la verdad no queríamos caer en sus trampas, Guillermo lo tomó de las manos y las quitó de su rostro, Juan lo miro con sus ojos rojos y dijo -he descubierto que mi esposa me engaña y no lo soporto, tengo que hacer que se delate para que se vaya y me dejen a mi a los niños, además no quiero cometer una locura, por que cada vez que la veo feliz y se que es por que saldrá con el o que salió, tengo ganas de... de...- y no podía continuar por el llanto, - ¿de que?- pregunte – de matarla- contesto Juan. Guillermo volvió a sobresaltarse por las palabras de Juan y le dijo –no digas estupideces, no debes ni pensar eso nunca, mucho menos pensarlo para que no se haga realidad ni en un momento de desesperación- yo no podía decir nada me había dejado atónito las palabras de Juan, le sugerí que lo acompañaría a su casa para evitar que hiciera una locura, al llegar a la casa de Juan su esposa no había llegado aun, me quedé un rato con el por si ella volvía y que el no hiciera una locura.

Eran las cinco de la mañana del día siguiente y sonó el teléfono, levanté la cabeza de la almohada para ver si no era una mala jugada de mi mente, pero ahí seguía sonando de nuevo, contesté y era Juan – tienes que venir a la casa- me dijo –no puedo decirte ahora pero es serio, ella esta con alguien afuera y no quiero cometer una locura como ustedes dijeron, ven pronto- no sabía que contestarle y aunque lo hubiera intentado el no me dejo responder y colgó. Ya me había hecho la promesa de no hacer este tipo de visitas con personas emproblemadas, pero sería peor si quedaba ahí si hacer nada y su amigo a punto de cometer un asesinato, así que me vestí para ir a verlo, al llegar a la casa lo distinguí saliendo por la puerta de atrás haciéndome señas para que entrara por ahí, su esposa estaba en la sala me dijo y que según ella el no estaba por que había ido a la despedida de Guillermo y esas despedidas duran hasta la mañana del otro día, ella no lo esperaba ahí, solo esperaría para que su amante se fuera y ahí le daría la sorpresa que el estaba en la casa, para que se fuera de su vida para siempre. Lo que yo no tenia ni idea es que ese para siempre implicaba algo mas y quizás me quería ahí para atestiguar por el, el amante se fue, Juan entro a la sala y le dijo –creíste que no te vería verdad, eres una descarada, vete de acá no tienes vergüenza en la casa los niños podrían verte. En eso me di la vuelta era una discusión que no me interesaba y Juan se descontroló, la golpeó con una silla en la cabeza y ella quedó tendida en el suelo si moverse y el salio corriendo como loco fuera de la casa, tomo mi auto y huyo, no pude hacer nada mas que hablar a una ambulancia y esperar a que vinieran a atenderla por que según yo seguía viva; pero la verdad el golpe la mato.

Querida Madre:
Esta vez no tengo excusas, sabia como son mis amigos y aun así me arriesgue después de haber pagado otras veces situaciones que no me correspondían, se y estoy conciente que mis amigos solo me han traído problemas desde la primera vez que estuve una noche en la cárcel por ellos, debí obedecerte lo se, pero la verdad no puedo veo que necesitan mi ayuda y se me borra de la mente todo lo que ha ocurrido.
No creo la verdad que esta vez me dejen libre tan rápido, no hay testigos y una persona muerta esta en medio de todo, esta vez pasare definitivamente mas tiempo que la última.
Mamá te pido de todo corazón que no pongas atención a este suceso para que tu enfermedad no se agrave, piensa que estoy en un largo viaje fuera del país, piensa que estoy casado y vivo lejos de ti, piensa lo que quieras menos que estoy en la cárcel, te lo suplico por que no quiero que sigas decepcionándote y sintiéndote mal por mi culpa.
Hoy por la mañana vino a verme mi abogado, dice que lo mas probable es que el juicio se retrase unas semanas mas, no entiendo por que hacen eso, si no tienen pruebas que me suelten, pero lo mas seguro según el es que al no tener pruebas y como soy el único testigo quizás me dejen libre en unos meses. Conversando con uno de los prisioneros que tienen treinta años de condena me comento un caso de alguien que le pasó lo mismo hace diez años, fue a juicio y sin pruebas ni nada lo enviaron a la cárcel dos años por complicidad, después de pagar esa pena lo llegaron a buscar queriendo inculparlo con pruebas falsas, pero que después de un tiempo, este se fue.
Lamento tanto ser siempre la causa de tus tormentos, siento tanto no haber sido un hijo del que pudieras sentirte orgullosa, perdóname por favor, ya se que debes estar cansada de oír lo mismo, ya no mas promesas echadas a la basura, ya no mas será la última vez; te doy mi palabra de honor, si es que puedes creer que aun la tengo, que a partir de el momento que salga de este lugar y ponga un pie fuera de el, no tendré nada que ver con cárceles de nuevo desde que salga de este lugar nos iremos a vivir lejos de acá, para evitarme problemas y seremos como antes de estos incidentes, una familia feliz tu y yo.
Te escribiré pronto
Antonio


Espere una semana y el juicio no se llevaba a cabo, mi abogado trataba de acelerar el proceso por que en realidad no era mi culpa, pero el juez no tenia tiempo. Después de tres semanas se llevo a cabo el juicio, tal como mi vecino de celda me dijo paso, dos años de cárcel, no pude hacer nada el jurado fue imparcial a pesar que no contaban con muchas pruebas, pero el abogado acusador fue demasiado convincente. No me quedaba mas que resignarme y esperar esos dos largos años, pero lo que no soportaría era avisarle a mi madre esto, ella enfermaría mas y yo no podría cuidarla.
Hice varios borradores de cartas para ella, pero ninguno me convenció para mandárselo, era muy duro condenado a dos años de prisión por complicidad en un asesinato. Me extraño mucho que mi madre en tres semanas no me escribiera, sobre todo por que le había mandado una carta contando lo sucedido, mi madre no es así, ella hubiera hablado, escrito o tal vez hasta ido a verme al saber que no iría en mucho tiempo a casa; no creo que fuera tanto para ella lo que sucedió y que haya decidido no hablarme nunca, antes que cualquier cosa mi madre sabia que no era capaz de hacer algo semejante, por la magnitud del cargo no creo que haya supuesto que lo hice, mas bien quizás se decepcionó al ver lo que había llegado hacer por mis amigos.
Pasó un año completo y no sabia nada de mi madre, definitivamente estaba triste, no podía hablarle, no podía escribir, no tenia cara para decirle lo que sucedía acá adentro, todo sucio, mal oliente, rodeado de drogadictos, asesinos y esa clase de personas con las que ahora soy comparado sin haber echo nada mas que tratar de ayudar a mi amigo.

Después de un tiempo de pensarlo pedí una llamada para hablar a la casa, mi madre tenia que escuchar la versión completa de lo que sucedió, tenia que obviar las versiones del juicio, las de los periódicos, las de las personas que conversaban en las calles y las de sus amigas sin mas trabajo que hablar de la vida de los demás. El guardia fue muy amable conmigo por que desde mi llegada no había pedido nada, me dejo llamar tres veces y no tuve respuesta alguna de ella, eso me entristeció mucho, quizás se había ido a ver a mi padre al cementerio, cuando ella se pone triste siempre va a verlo eso le hace bien y se siente mas tranquila aun después de un mal día.

No supe de mi madre y no se si ella sabrá de mi ahora, ya casi cumplo dos años en prisión y ella no vino a verme, pero si salgo rápido iré a verla, le comprare de sus flores favoritas, la llevare a comer algo rico, y bueno, luego conversaremos muchas horas de todo lo que ha pasado durante este tiempo sin vernos.
Ahora vino a verme el abogado de nuevo, tal parece que la familia de la esposa de Juan ha puesto otra demanda, el juez quiere abrir el caso por que han aparecido nuevas pruebas y un testigo, pero testigos de donde, a menos que se trate de... No había terminado de pensar cuando el abogado me dijo que se trataba del esposo de la víctima, no podía creerlo Juan me había traicionado, el juicio se llevo a cabo y bueno lastimosamente salí perdiendo, Juan invento un testimonio tan convincente si yo hubiera sido jurado me convence también, el juez no dijo nada mañana daría el veredicto había sido una jornada larga para reabrir ese caso.

Querida Madre:
Hace dos años no tengo noticias de ti, quiero pensar que estas bien, que nada malo te ha sucedido, que sigues en casa pero que no contestas por que las veces que te he hablado o escrito no has estado en casa o quizás se extraviaron o no quieres tocar el tema por tu salud, para evitar que se complique.
Se llevo a cabo un nuevo juicio en mi contra Juan fue testigo y me acuso de haber asesinado a su esposa, sus argumentos fueron que yo era el amante y que me moleste con ella al ver que no lo dejaba a el, yo no tenia ningún testigo así que no tuve pruebas de lo que el decía o de lo que yo decía, el juez paso toda una mañana meditando el caso pero aun no decide nada, me preocupa mucho no saber que pasa en especial por que si me sucede algo malo no volveré a verte nunca. Te pido que vengas a verme, quiero conversar, aclarar las cosas y sobre todo darte un gran abrazo para que veas y creas que tu hijo es inocente.
Madre no puedo soportarlo mas, tengo que decírtelo, espero no te pongas triste, esta es una promesa que no volveré a romper nunca, jamás me volverás a ver en la cárcel por ningún motivo, no quiero ser carga para tu pobre corazón. Quiero que al recordarte o hablar de mi digas lo orgullosa que estas en lugar de agachar la cabeza, quiero que me veas a los ojos una vez mas y que me digas lo mucho que me quieres, quiero disculparme eternamente por todas las veces que te hice juramentos vanos, mamá te amo... perdóname por llorar, tengo que ser fuerte lo sé, pero tengo que decirte lo que siento para que estés segura y no lo olvides por mas cosas que hablen de mi las personas que nunca me conocieron.
Espero verte pronto, tendrás noticias mías después que me dejen libre.
Te Ama, tu hijo
Antonio


Es viernes por la noche y aun no he llegado a casa, tengo mucho frió y hambre, pero espero que pase pronto, lentamente la celda se me hace borrosa, no recuerdo mucho de ella ni el por que estuve en ella. Mama debe de estar preocupada hace dos años que no sabe de mi.
Ya estoy libre, fui a mi antigua casa, como había cambiado, todo el jardín diferente, la sala estaba amueblada con otros muebles, la cocina había cambiado decorado, los cuartos estaban remodelados y especialmente mi cuarto ya no estaba, se había convertido en una pequeña biblioteca. Salí de mi casa de inmediato, en la terraza, al colocarme las manos sobre el rostro oí unos ruidos en la casa y me levante para ver a mi madre, la sorpresa fue que no era ella, se trataba de otra familia, mi mamá se había cambiado de casa hace tiempo y por eso no contestaba mis llamadas ni respondía mis cartas. En una de las mesas de la sala había visto una dirección donde decía debían mandar los recibos y cualquier correspondencia que recibieran que no fuera para ellos, supuse que era donde vivía mi madre, así que me decidí ir a verla. Camine casi dos horas, pero no me sentía nada cansado, quizás por la emoción de ver a mamá, al llegar a la casa note que ella estaba adentro y que parecía estar leyendo algo, no quise interrumpirla así que me asome a la ventana para verla y luego tocar la puerta cuando ella terminara su lectura. No había cambiado nada desde hace dos años; su cabello corto y oscuro, su piel blanca y suave y la ternura que se dibujaba en su cara siempre que leía... un segundo leía mis cartas y estaba triste, quizás eran las cartas que le escribí hace dos años ahora sabría de mi ausencia, ahora sabría que no la abandone; pero cerca de sus manos tenia otra carta de la prisión no podía distinguir lo que era así que espere a ver que ella la leyera, empecé a ver todo borroso no podía distinguir nada mi madre empezó a llorar y yo no podía acercarme para consolarla, sería muy duro para ella después de lo que leyó, verme ahora.

Mi madre se fue a dormir y yo aun seguía observando por la ventana, al ver que ya no bajo de su cuarto decidí entrar para leer lo que le había causado tanta tristeza; eran mis cartas, mis últimas dos cartas de prisión, las personas inquilinas de la casa se las habían entregado hasta hoy por que habían perdido su dirección, lo mas seguro es que la habían coleccionado y es por eso que la tenía sobre la mesa. La otra carta era de la prisión –quizás le decían que ahora saldría libre y ella se emociono tanto que lloró- pensé para mi, pero lamentablemente no se trataba de eso, la carta era un aviso donde le decían a mi madre que sería ejecutado hoy a las nueve de la noche.
Solté los papeles de inmediato y observé el reloj, eran las once y media de la noche, mi mamá no sabia de mi aún, ya era demasiado tarde para decirle cuanto lo sentía mis cartas llegaron muy tarde a sus manos y aun no se la razón por la que se cambio de casa; pero lo que mas lamento de todo es que no era mi culpa, nunca lo fue y aun así ahora no podré aclarar nada para ella ni para nadie mas.

Querida Madre:
Ya no tengo más excusas, ni más promesas para ti. Pronto estaremos descansado juntos.
Antonio


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