de repente el reflejo en mi espejo no es el mismo. viene del pasado, de un estado presuntamente acabado. me odio tanto que te odio, lo odio. será el efecto nocturno de los ambiguos caramelos. será el whisky, el bodka, o el intruso en mi cuerpo. mi mente desmiente que te sueña y sueña que ya no te miente. mis pechos crecen y mi barriga en construcción ya va tomando una nueva forma. los cigarrillos se apagan, se esconden las copas. cambio el modo de vida, ya no sólo mía. durant el día me camuflo... las mentiras hacen todo tan seguro. pero en las noches no las creo. es el whisky, las pastillas y el bodka. todo hace efecto, y el intruso patea de miedo.-