El decifrar de el movimiento de tus manos me tensa,
El olor que expulsa el perfume en tu cuello me trauma,
Las palabras saliendo de tu boca me hieren,
El brillo en tus ojos que me hipnotiza,
El sentido de tu mirada, la distancia entre nuestros mundos,
El sentimiento perdido, la caricia robada,
El silencio...

Las notas de la musica pasan sin notarse,
Nuestras miradas se repelen como polos iguales,
Sabiendonos, no teniendonos pero amandonos.
La saliva desperdiciada, el momento perdido,
La magia extinguida, asi como el cigarro,
Ese que se apagó al no ser consumido,
Esperando y tentando al tiempo; para que un dia;
Un dia como cualquier otro,
Se recoja el cenicero y se tire a la basura,
Sin que nadie recuerde la llama azul y de todos colores
Que lo habia encendido.


La distancia se acorta entre recuerdos;
Entre sensaciones, entre lagrimas,
Y asi como un son repetitivo de esa canción
La sensacion de estar contigo se agranda.
Nuestras miradas se cruzan Por una ultima vez.
Nuestras manos temblorosas se recojen,
Y deciden esconderse entre bolsillos,
Esperando el momento fatal: la conclucion
El adios definitivo...

Y asi como el son repetitivo de esta misma canción
Una vez mas lo nuestro da el mismo giro,
Me levanto y camino como queriendo huir,
Como queriendo que veas las lagrimas correr.
Te levantas tras de mi...
Pero no me sigues, como lo hacias siempre.
Y te vas y me voy...